Se aprueba el tramo Arrúbal-Navarrete de la futura autovía A-68

El proyecto de trazado Autovía A-68. Tramo: Arrúbal-Navarrete ha sido aprobado por el Ministerio de Fomento, tal y como se ha publicado el martes 8 de agosto en el Boletín Oficial del Estado (BOE). La obra tiene un presupuesto de licitación estimado de 146 millones de euros.

El proyecto consiste fundamentalmente en la utilización de la autopista AP-68 entre Arrúbal y Navarrete como circunvalación de Logroño libre de peaje, convirtiéndose en una alternativa al eje N-232-LO-20 con una amplia remodelación en cuanto a la implantación de nuevos enlaces y remodelación de los existentes. Así, mejorará su conexión con las redes del estado y la autonómica, constituyéndose como la futura variante sur de la ciudad de Logroño.

La obra comprende una longitud de 29,2 kilómetros correspondientes al tronco de la autovía A-68 y discurre en dirección este-oeste por los términos municipales de Murillo de Rio Leza, Agoncillo, Arrúbal, Logroño, Villamediana de Iregua, Lardero, Navarrete y Fuenmayor. El tramo de la nueva A-68 será libre de peaje, por lo que el proyecto incluye la construcción de dos nuevas áreas de peaje troncales que se ubicaran en los puntos kilométricos 150,5 y 122 de la AP-68.

Se diseñan o remodelan un total de 8 enlaces: el de Arrúbal, el de Agoncillo, el de Recajo, el de acceso a Logroño y Lardero, el enlace con Fuenmayor y el que se da con la LR-250.

El nuevo tramo de autovía, que aprovecha en su mayor parte el trazado actual de la AP-68, obliga como indica la normativa actual, a revisar y adecuar todos los elementos de señalización, balizamiento y sistemas de contención existentes, así como a llevar a cabo los despejes necesarios en curvas a efectos de garantizar la visibilidad.

Se contempla la realización de 30 estructuras: 12 pasos superiores, 15 pasos inferiores además de 3 muros de contención, siendo 2 de hormigón armado y 1 de escollera y la reposición de 48 caminos agrícolas. Además, se prevé la reposición del Camino de Santiago afectado por las obras en el último enlace para lo que se diseña un paso superior y dos pasos inferiores.

Finalmente, se incluyen las medidas protectoras y correctoras para minimizar las afecciones ambientales de las actuaciones proyectadas.