Sobre ruedas con La Frikilería: “Harry Potter es el best seller y ahora ser friki mola”

Pelo rosa, bolso de Star Wars y sonrisa permanente. Así llega Beatriz Álvarez a nuestra cita, a las puertas de su templo: La Frikilería. La ocasión merecía un vehículo especial y por eso la invitamos a bordo de un Smart eléctrico, tan silencioso como divertido, tanto en su estética como en la conducción.

Así, en nuestro recorrido sobre ruedas de la mano de Mercedes, vamos descubriendo los secretos de La Frikilería. Una pequeña tienda que abrió sus puertas en Logroño hace poco más de cuatro años y que se ha convertido en una referencia mundial para el mundo del frikismo, en el sentido más amplio de la palabra.

“Lo que antes era negativo ahora es guay, ser friki mola”

La Frikilería, con el campamento base bien asentado en Logroño, con una tienda física en la calle Múgica y un almacén en el Polígono La Portalada, vende productos a todo el mundo y no deja de crecer. Actualmente cuenta con más de 260.000 seguidores en Facebook y una facturación anual que ya quisieran muchas marcas.

“Todo ha ocurrido de forma muy natural”, cuenta Beatriz mientras recorremos las calles de Logroño, “en la adolescendia empecé a leer comics y manga, tenía amigos frikis, jugábamos a la Play... y poco a poco, lo que antes era negativo, ahora es guay, ser friki ahora mola. Cuando acabé la carrera y volví a Logroño no sabía qué hacer, había estudiado diseño y me gustaba este mundillo pero no quería una tienda de comics porque ya había y, como me gustan mucho las chorraditas, me lancé con mi tiendita friki”.

Su especialización y su magnetismo en redes sociales le hicieron crecer muy rápido. Y así tuvo que ir adaptándose. “Al pirncipio me preguntaban por Facebook si vendía, así que empecé a hacer paquetitos y llevarlos yo misma a Correos pero enseguida se me fue de las manos y hubo que hacer una web que también muy pronto se quedó pequeña y tuvo que crecer”. Ahora trabaja con una plantilla de nueve personas que en épocas como la Navidad se multiplican.

La Frikilería: un comercio online con alma de tienda de barrio

Entre sus estanterías encontramos los objetos más vendidos como la cerveza de mantequilla de Harry Potter, el licor de fuego valirio de Juego de Tronos, mascarillas de Disney o chocolate Wanka pero también cosas que ni te imaginarías. “Tenemos miles de referencias y, aun así, nos piden cosas que no tenemos pero las buscamos y, si existen, las conseguimos”, explica.

Pero si hay un frikismo estrella es el de Harry Potter. “Es lo que más se vende con mucha diferencia, mandamos cosas de Harry Potter a todo el mundo, es impresionante”, cuenta. Y es que, aunque al principio pensó que su público serían hombres de pelo largo y vestidos de negro, la realidad le ha demostrado que el mundillo friki nos llega a todos, y la mayoría de su clientela son mujeres de menos de 30. “Me encanta cuando viene una señora y se compra un bolso porque le parece que es monísimo para una boda y resulta que no sabe que es de Ironman”.

Si algo tiene claro “la frikilera” es que ni en sus mejores sueños hubiera imaginado esto y que “a estas alturas deberíamos cambiar la definición de frikismo porque Star Wars ya no es friki, a todos nos gusta alguna serie, algún personaje”.