Sólo sirve la victoria

Después de que el derbi, como se presuponía, no aclarara ni para bien ni para mal el futuro de ninguno de los dos equipos riojanos de Segunda B, el Logroñés regresa este domingo a Las Gaunas para jugar, otra vez, una final ante el Burgos. El problema es que, tratándose del conjunto castellano, casí es mejor jugar en El Plantío que hacerlo como local.

Y es que con tres puntos vitales en juego llega a Las Gaunas el segundo mejor visitante de la categoría que, de momento, mantiene vivas sus opciones de salvación gracias, precisamente, a su rendimiento a domicilio. El Logroñés, por su parte, no puede permitirse más errores en casa. Sumar de tres en tres en Las Gaunas se presume la única opción para que los de Abadía salgan airosos de su titubeante temporada.

El partido llega, además, en un momento especialmente crítico. Otra semana más (y ya son demasiadas) los despachos han copado la información del club blanquirrojo. Con Abadía de nuevo en el túnel de vestuarios, con la plantilla sin cobrar y con los responsables de la entidad amenazando con 'tomar las medidas oportunas' contra sus jugadores tras la sentada del derbi los 90 minutos se presumen duros para todos. Para los jugadores por cuestiones deportivas y para la directiva porque con su actitud ha conseguido hartar a la afición.

En lo puramente deportivo Abadía podrá repetir once si le convenció lo visto ante el Logroñés CF ya que sólo Eneko, que evoluciona favorablemente de la contractura que sufre en el abductor, se ha quedado fuera de una convocatoria a la que ha regresado Miguel.

Enfrente el Burgos presentará la novedad de Ibai Rejas que después de siete semanas alejado de los terrenos de juego regresará al once inicial de un club que también ha acaparado titulares extradeportivos. Y es que la Junta Directiva del Burgos abrió el pasado jueves un expediente disciplinario a los jugadores José Antonio, Juanma y Pedro García, que rebasaron ampliamente el horario máximo fijado para salidas nocturnas en los días previos a la disputa del choque ante el Guijuelo.

Como en Logroño, los problemas crecen cuando lo deportivo no funciona.