‘Tiempo y clima cambiantes’

El Centro Cultural Caja Rioja de Arnedo acoge este viernes 13 de marzo la conferencia ‘Tiempo y clima cambiantes’, impartida por Evelio Álvarez Lamata, delegado Territorial de la Agencia Estatal de Meteorología en La Rioja. De entrada libre, se desarrollará a las 20.00 horas.

La especie humana siempre ha estado muy influida tanto por el “clima” como por el “tiempo meteorológico” y hasta ahora ha sido capaz de irse adaptando a sus continuas oscilaciones. Para comprender las relaciones recíprocas entre ambos conceptos, debemos considerar los mecanismos climáticos, y en qué manera sus variaciones pueden afectar al tiempo y sus cambios.

Para un lugar determinado, mientras que el “tiempo” está caracterizado por los valores de las variables meteorológicas en ese momento, el “clima” sintetiza estadísticamente los valores de una serie de esas medidas realizadas durante un período temporal suficientemente largo.

El sistema climático de la Tierra es de una gran complejidad, estando implicados la atmósfera, los océanos, la superficie de la Tierra, la biosfera, los hielos permanentes o los aerosoles, entre otros factores.

La Tierra recibe la energía solar y equilibra su intercambio energético reemitiendo energía al espacio, pero ciertos gases, como el vapor de agua, el dióxido de carbono o el metano, retienen parte de esta energía, creando así el “efecto invernadero” que hace posible la vida en el planeta.

Al tratarse de un sistema dinámico que ha evolucionado durante millones de años por efecto de las alteraciones de la órbita y de la inclinación de la Tierra, la radiación solar, las erupciones volcánicas y otros fenómenos naturales, así como por la presencia de vida en los más recónditos lugares, el cambio y la variabilidad son intrínsecos al clima. La temperatura, el viento y la precipitación fluyen constantemente, y fenómenos extremos como las sequías o las tormentas son manifestaciones de esa variabilidad.

En nuestros días, lo realmente característico es la rapidez e intensidad del calentamiento terrestre, que ha sido mayor que en cualquier otro período de los últimos milenios y con claros efectos en los ecosistemas.

El crecimiento de la población, la utilización de combustibles de origen fósil, los cambios en las prácticas industriales y los usos a que se destinen las tierras influirán en los niveles futuros de gases de efecto invernadero y, por consiguiente, en el ritmo de calentamiento.