Un vino que puede con todo

R2: ¿Qué supone este premio para Luberri?

Supone un reconocimiento a lo que estoy haciendo toda la vida y por lo que estoy luchando como defensor de la maceración carbónica. No esperaba ganar porque todos estaban muy buenos (los bodegueros podían catar en la final, pero no votar). Es una satisfacción, sobre todo cuando parece que la gente prefiere vinos de crianza.

R2: Coincide con los organizadores en que esta forma de elaboración se estaba perdiendo y que empieza a remontar en consumo?

Está remontando pero es muy duro. Aparte de lo complicada que es la elaboración, se está perdiendo porque la gente piensa que un Crianza o un Reserva pueden ser mejores. Pero para este vino también tienes que elegir bien la uva, no utilizar la peor que queda después de seleccionar la de los otros vinos.

R2: ¿Qué le falta, entonces?

Creo que es un vino que no está bien explicado. Ahora que se habla tanto del ‘Terroir’, yo hago maceración carbónica de ‘Terroir’, porque tomo la uva de cuatro fincas destinadas a eso, de unas tierras más pegadas al Ebro, más arenosas, que dan un vino más fresco y joven. Estos vinos no deben de tener muchas estructura, porque no se van a envejecer, pero en ellos buscas nariz, fruta, encontrar la uva. Hay que tener en cuenta que sale al mercado el día 15 de diciembre, por lo que es un vino en estado puro.

R2: ¿Acabaremos viendo vinos de maceración carbónica de 60 euros?

No, no. Pero hay que poner buena uva. A la gente que le gusta es fanática de la maceración carbónica; es lo que quiere.

R2: Es un vino para ciertas comidas…R2:

En realidad es un vino que acompaña a cualquier cosa. Sí es cierto que casa muy bien con el picoteo y los aperitivos. Además se puede tomar con arroces, pero también con una carne. Me pasa muchas veces que viene gente a la bodega, les saco toda la gama, hasta el vino de autor, y muchos se pasan toda la comida con el de maceración carbónica.

R2: ¿Dónde gustan más estos vinos?R2:

Sobre todo se vende aquí, en La Rioja, y en el norte, en San Sebastián aunque yo vendo muy bien en Madrid y también en Asturias. Sin embargo, en Galicia y Cantabria es más difícil. Yo creo que donde mejor se podría beber es en la costa, donde hace calor, porque es un vino que hay que tomar a 13 ó 14 grados, bien fresquito.