Vuelve el balonmano

Hace casi mes y medio que el Naturhouse no juega un partido oficial. Los sinsabores de la Copa del Rey, la Copa Asobal y las lesiones ya están casi olvidadas. La enfermería luce más vacía que nunca aunque conserva a Malasinskas y a Velasco. La Liga Asobal comienza su segunda vuelta y al conjunto riojano le toca visitar al colista, el histórico Bidasoa. Llega al partido con tres nuevos rostros en la plantilla: Miguel Sánchez-Migallón, José Manuel Rial y Patrick Eilert. Podrán jugar los tres, algo que en el caso del danés Eilert no se confirmó hasta ayer. Los trámites del deporte, ya saben.

Vuelve la competición y el fatídico calendario que obliga a jugar miércoles-sábado, miércoles-sábado. El de hoy es un encuentro que el equipo logroñés debería solventar con facilidad (en la ida se impuso por 37-19), pero la cautela, de la que a veces se peca en exceso, hace al entrenador Jota González mantener la calma. En las filas irundarras causan baja Adrian Crowley, Ekaitz Mujika y Koldo Jauregi.

Primera piedra de toque para un Naturhouse que marcha cuarto en la liga con 20 puntos, por detrás del todopoderoso Barça (30 puntos), del Fraikin BM Granollers (22) y del BM Huesca (21). Poco misterio tiene este partido que, si bien no es comparable al que jugó contra el mismo rival el septiembre pasado (el Bidasoa se encontró en Asobal por motivos económicos cuando su equipo estaba diseñado para la segunda división), sí servirá para comprobar cómo se van acomplando las nuevas piezas al rompecabezas que es el sistema de juego de Jota González.

19 horas. Polideportivo Artaleku. Estreno del conjunto riojano en 2014. Sobre el Bidasoa, el técnico del Naturhouse señaló que ha cambiado bastante, en especial su primera línea. “Han hecho fichajes importantes, como Juan Agustín Vidal, ha recuperado de una lesión al lateral derecho, Roberto Álvarez, y están dirigiendo muy bien un chaval joven, Jon Azkue. Creo que su fuerza es el bloque más que el individualismo. Es un equipo rápido y, sobre todo, su gran virtud es la continuidad que da a su juego”.