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Ayuso inaugura la precampaña con el anuncio de la enésima rebaja de impuestos que beneficia a las rentas altas

Con la llegada de la campaña electoral, en el PP de Madrid es ya costumbre prometer rebajas de impuestos. Es una tradición que este lunes Isabel Díaz Ayuso no ha querido romper anunciando que, si revalida mandato como auguran las encuestas, volverá a acometer una rebaja generalizada de medio punto en todos los tramos del IRPF autonómico que pasará del 8,5 al 8%. La merma en las arcas públicas, según ha cifrado la propia Ayuso, será de 334 millones de euros.

Esta rebaja se sumaría a la ya aprobada por el Gobierno regional hace poco más de un año –de otro medio punto del impuesto sobre las personas físicas– y por la que el Gobierno dejó de recaudar otros 334 millones. También durante 2022, el Ejecutivo regional aprobó otra ley que amplió hasta el 25% la bonificación del impuesto de Sucesiones y Donaciones entre hermanos, tíos y sobrinos y que afectaba a apenas a 11.500 ciudadanos y otros 30 millones menos para las arcas públicas.

Esta agresiva política fiscal en Madrid no la empieza Ayuso, comienza en 2008 con Esperanza Aguirre, pero la presidenta de la Comunidad de Madrid la ha llevado a su máxima expresión asegurando que es el máximo exponente de la “libertad”. “Llevamos 18 años seguidos bajando todos los impuestos y sin subir ninguno”, presumió hace unos meses el consejero de Economía y Hacienda, Javier Fernández-Lasquetty, que cifró el coste para las arcas públicas en todos esos años en unos 60.777 millones de euros en esas casi dos décadas.

El impacto de la nueva rebaja de medio punto más en el tramo autonómico del IRPF beneficiará a las rentas más altas, pese a que Ayuso defiende que beneficia a las rentas más bajas. La realidad, por mucho que la presidenta regional quiera retorcer los datos, es que quien más gana, más ahorrará. Quien menos, notará muy levemente la medida.

Pasó con la rebaja impositiva sobre el tramo autonómico del IRPF aprobada en 2021. Para una renta de 12.000 euros, el ahorro mensual ha sido de 2,7 euros, 33 euros anuales. Para los contribuyentes con un salario de 18.000 euros anuales, el más habitual de nuestro país, el supuesto ahorro ha sido de 5,3 euros al mes, 69 euros anuales. Para el sueldo medio, 24.000 euros, la última rebaja impositiva ascendió a 7,7 euros mensuales, 93 euros anuales. El llamado “ahorro” que defiende Ayuso “para todos” a quien realmente beneficia es a las rentas más altas. Es el caso de un salario de 90.000 euros –la candidata del PP cobra 103.000 como presidenta–, el ahorro anual asciende a 423 euros. Y así progresivamente, para una renta de 240.000 euros, el montante ahorrado es de 1.173 euros.

La anunciada este lunes para la próxima legislatura si el PP vuelve a gobernar, sería la sexta rebaja que acomete en el impuesto de la renta la Comunidad de Madrid. Mientras, en estos años, la inversión en materias troncales del estado del bienestar como la educación o la sanidad en la región no han estado a la cabeza del conjunto de España. Más bien todo lo contrario. En Sanidad, por ejemplo, es la región que menos invirtió por habitante en 2021, 1.170 euros, frente a los más de 1.400 euros de la media nacional.

A la cola de la clasificación de gasto por habitante en Servicios Sociales se encuentra de nuevo Madrid, 275 euros, frente a los 332,8 euros de la media nacional. Al igual que con el gasto en Sanidad y en Servicios Sociales, Madrid es también la que menos invierte en Educación, 756 euros por habitante, frente a los 963 de la media nacional o los 1.366 de Euskadi, la que más.

Las rebajas fiscales en la Comunidad de Madrid, especialmente a las grandes fortunas, comenzaron a implantarse con Esperanza Aguirre, en 2002, continuaron con Ignacio González, se intensificaron con Cristina Cifuentes, y han alcanzado su máximo exponente con Isabel Díaz Ayuso.

Otras bonificaciones fiscales para las rentas más altas

A la rebaja generalizada de tributos se han sumado otros beneficios fiscales que aplica Madrid a los impuestos cuya gestión cede el Estado a las comunidades autónomas. Esa transferencia nació como una forma de involucrar a las autonomías para que se hagan responsables de parte de sus ingresos ya que gestionan el grueso del gasto social (sanidad y educación, principalmente).

La Comunidad de Madrid ha sido pionera además a la hora de bonificar impuestos como Sucesiones y Donaciones, Patrimonio o Actos Jurídicos Documentados. Las transferencias de Patrimonio están libres de impuestos porque se bonifican al 100% y la administración regional deja de recaudar cada año 992 millones de euros para un total de 18.000 fortunas. El impuesto de donaciones y sucesiones se bonifica al 99% entre padres e hijos y entre cónyuges, y en un 25% para transmisiones entre hermanos; tíos y sobrinos.