Lo que sabemos del nuevo bulevar que irá de Cibeles a Puerta de Alcalá: aprobación inminente, carril bici y más aceras

Diego Casado

Madrid —
9 de septiembre de 2025 11:57 h

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El Ayuntamiento de Madrid ultima el concurso para crear un bulevar de Cibeles a la Puerta de Alcalá. Su aprobación irá a Consejo de Gobierno la semana que viene, aseguró el alcalde este lunes durante el Debate sobre el Estado de la Ciudad, el punto de partida para el arranque de las obras.

Los trabajos se sumarán a varios soterramientos que están generando importantes problemas de movilidad en la A-5 y en Castellana Norte, además de otras reformas como la ampliación de la línea 11 en Conde de Casal o la cubrición de la M-30. En este caso, José Luis Martínez-Almeida asegura que “los estudios de movilidad garantizan que no va a ser demasiada la afección porque es una obra bastante limitada en el espacio”, ha indicado este martes duranten una entrevista en Onda Madrid.

El regidor ha evitado adelantar más detalles sobre el proyecto. Solo ha asegurado que “va a quedar un bulevar en medio que va a permitir que haya un eje que en este momento no hay y que dificulta considerablemente la visión de Puerta de Alcalá desde Cibeles”. El objetivo es conseguir una “continuidad natural para que todos los madrileños puedan disfrutar del monumento quizás más emblemático de la ciudad de Madrid”.

Según detalles del proyecto a los que ha tenido acceso ese periódico, el Ayuntamiento de Madrid apuesta por reducir el tráfico en este tramo para crear un carril bici más seguro, un pequeño bulevar y un acceso peatonal a la Puerta de Alcalá, a la que se podrá acceder andando y caminar tanto a su alrededor como atravesarla por debajo.

La idea del equipo de Almeida es dejar el tráfico rodado en tres carriles de subida y otros tres de bajada, incluyendo en ellos dos para el carril bus-taxi, frente a los nueve actuales (cuatro de subida y cinco de bajada), a lo que se añadirá un carril bici bidireccional junto a la acera de los pares, protegido por árboles y setos del resto del tráfico, según planos no definitivos del proyecto -pero muy avanzados- consultados por Somos Madrid.

Aunque las mayores novedades llegarán en las zonas de aceras: la de los impares se ensanchará considerablemente y se añadirá una segunda hilera de árboles, al estilo del tramo de Alcalá que confluye en la Gran Vía. En el centro aparecerá un estrecho bulevar peatonal que permitirá transitar hacia la Puerta de Alcalá. Su anchura será sensiblemente inferior a la que dejaban ver las primeras imágenes del proyecto que desveló el alcalde en febrero del año pasado y que, aunque se tomaron como definitivas por el público general, eran solo un esquema de movilidad que distará bastante del resultado final.

El cambio más llamativo para madrileños y visitantes de la Puerta de Alcalá estará en la rotonda donde se encuentra, en la Plaza de la Independencia. Allí se ampliará la isleta triangular de acceso desde el oeste y se creará un nuevo paso de cebra que creará un acceso peatonal desde el pequeño bulevar, hasta el emblemático monumento. Alrededor habrá un adoquinado especial para realzar el espacio y también se ha estudiado un nuevo ajardinamiento alrededor de los arcos, con caminos peatonales para recorrer la rotonda.

El renovado carril bici tendrá dos sentidos y aproximadamente 2,6 metros de ancho. Discurrirá a lo largo del actual, en la calzada de subida desde Cibeles, pero se extenderá alrededor de casi toda la parte exterior de la rotonda de la Puerta de Alcalá, enganchando con la acera ciclista de la calle Serrano. La estación de Bicimad se colocará más cercana a la calzada en lugar de donde está ahora, pegada a la puerta de entrada al Retiro.

La planificación de la reforma la está llevando a cabo el área de Obras y Equipamientos y se encuentra en su fase final tramitación, por lo que todavía no puede darse por definitiva. Cualquier cambio urbanístico en esta zona tiene que pasar por la Comisión Local de Patrimonio Histórico y tiene que contar con el visto bueno de la Unesco, ya que toda la zona está declarada como Patrimonio de la Humanidad desde el año 2021.