El consorcio automovilístico Stellantis ganó en 2022 un total de 16.800 millones de euros, en lo que supone un ejercicio récord para la compañía fruto de la fusión de los grupos PSA y FCA. Los ingresos ascendieron a 179.600 millones de euros, un 18% que el año anterior, y enfilan ya el objetivo de superar los 300.000 millones a finales de esta década, uno de los objetivos centrales de la estrategia Dare Forward 2030.
Cuando se presentó este plan, otra de las metas consistía en mantener un margen de beneficios por unidad superior al 10% durante toda la década y superar el 12% en 2030, un propósito que se ha cumplido ya en 2022 con un 13% y que deja el beneficio operativo de la empresa en los 23.300 millones de euros. Su flujo de caja se situó en los 10.800 millones de euros, un 78% más, y bien encaminado para apuntarse otro de los hitos marcados para la próxima década: los 20.000 millones de euros.
Coincidiendo con la publicación de estos buenos resultados, Stellantis ha anunciado que repartirá un bonus que suma 2.000 millones de euros entre sus trabajadores en todo el mundo. También ha aprobado un programa de recompra de acciones de hasta 1.500 millones de euros que se asienta en la importante generación de flujo de caja de la compañía y en su sólido balance.
De acuerdo con la información de la compañía, las sinergias entre todas las marcas que componen el grupo, entre ellas Peugeot, Citroën, Opel, Jeep y Fiat, generaron un efectivo de 7.100 millones de euros, con el que se supera el objetivo de 5.000 millones anuales que se había propuesto para 2025.
El impulso de la electrificación dentro del consorcio se aceleró durante el año pasado con un aumento interanual del 41% en las ventas mundiales de vehículos eléctricos de batería (BEV), que llegaron a las 288.000 unidades. Su oferta comprende 23 modelos eléctricos puros que se encuentran ya en el mercado, y prevé que esa cartera se amplíe hasta los 47 vehículos a finales de 2024, apoyando el objetivo de tener más de 75 eléctricos en todo el mundo y unas ventas globales de BEV de 5 millones para 2030.
En particular, la marca Jeep inicia la primera fase de su ofensiva eléctrica a través del lanzamiento del Avenger, su primer SUV movido por baterías y elegido recientemente Coche del Año en Europa 2023. A este modelo le seguirán el Recon y el Wagoneer S, también totalmente eléctricos.
Crecimiento fuera de Europa
El CEO de Stellantis, Carlos Tavares, ha manifestado sobre estos datos tan satisfactorios para la compañía: “Además de nuestros resultados financieros récord y la ejecución también centrada del plan estratégico Dare Forward 2030, hemos demostrado la eficacia de nuestra estrategia de electrificación en Europa. Ahora tenemos la tecnología, los productos, las materias primas y el ecosistema completo de baterías para liderar ese mismo viaje transformador en Norteamérica, comenzando con nuestros primeros vehículos Ram totalmente eléctricos a partir de 2023 y Jeep a partir de 2024”.
El grupo encuentra otras razones para el optimismo en la buena evolución de otros mercados distintos al europeo. Todas las regiones en que se halla presente están creciendo -asegura en su comunicado- y ofreciendo una rentabilidad récord. El llamado Tercer Motor, que incluye Oriente Medio y África, Sudamérica y China e India y Asia-Pacífico, aumentó sus ingresos netos un 34% interanual y más que duplicó su contribución al resultado operativo ajustado hasta los 3.800 millones de euros para 2022, avanzando hacia la consecución del objetivo de más del 25% de los ingresos netos globales de la empresa para 2030.
Stellantis concluye que, después de solo dos años de existencia tras la fusión, todos estos registros representan “solo un atisbo del gran impacto que la empresa espera tener en los ecosistemas de movilidad en el futuro”.