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El cierre del pabellón H4 satura, de nuevo, el Complejo Hospitalario

Uno de los accesos al Hospital de Navarra.

Celia Bustamante

Desde hace dos semanas, el Complejo Hospitalario está “al límite”. Un nuevo periodo de saturación por falta de camas con el pabellón H4 cerrado de nuevo. La dirección del hospital cerró la planta en Semana Santa, una vez transcurrida la mayor afección de la gripe y ante las vacaciones, y no se ha vuelto a abrir. Un cierre que lleva de nuevo al Complejo a la saturación y al aumento de derivaciones de pacientes a clínicas privadas.

Son 32 camas que, en principio, serían abiertas de nuevo en caso de necesidad. Los profesionales creen que ha llegado ese momento, porque desde hace dos semanas apenas quedan camas disponibles en los hospitales. Los sindicatos han recogido el malestar de los trabajadores, sobre todo de admisión, que son quienes tienen que cuadrar el “puzzle” en el que se ha convertido tramitar un ingreso en el Complejo. Con las camas disponibles, se tramitan los ingresos “como se puede”. Muchos pacientes son ingresados y permanecen en unidades que no corresponde por su enfermedad por falta de camas en las plantas correspondientes.

Y no es la primera vez que ocurre. Desde finales de 2014 lo trabajadores han denunciado en varias ocasiones la falta de camas en el Complejo, que ha llevado a abrir y cerrar el pabellón H4. La última vez que abrió fue para atender el pico de gripe y cerró en Semana Santa, con la afirmación de la dirección de que reabriría si fuera necesario. Para entonces, varios pacientes habían pasado hasta 17 horas en Urgencias con la orden de ingreso esperando a tener una cama disponible.

Parece que el momento ha llegado, y el H4 permanece cerrado. Según los sindicatos, el argumento utilizado por los responsables del Complejo es que no hay presupuesto para contratar personal. Aseguran además que la dirección les trasladó que esa planta abriría de nuevo pero no ha sido así y, una vez más, dicen las centrales, son los trabajadores de Urgencias los que están sufriendo la saturación.

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