Castilla-La Mancha afirma que los planes de cuenca “contravienen” a UE

El Gobierno de Castilla-La Mancha agotará la vía de los tribunales de justicia españoles para defender el agua del Tajo ya que tiene “muy claro” que los planes hidrológicos aprobados por el Gobierno central en funciones “contravienen la filosofía y la estrategia de fondo del agua en Europa”.

Así lo ha indicado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, al hilo de la visita que un grupo de europarlamentarios está realizando a la provincia de Toledo para comprobar el estado del río Tajo

“Vamos a intentar pelear desde el punto de vista de la jurisdicción española y tengo muy clarito que los planes hidrológicos del país, pero sobre todo los que afectan a Castilla-La Mancha, contravienen con mucha claridad la filosofía y la estrategia de fondo del agua en Europa. Clarísimamente”, ha indicado Page.

El presidente castellanomanchego ha criticado que los planes hidrológicos los haya aprobado un gobierno en funciones y ha aludido a las palabras del presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS), José Manuel Claver, que la semana dijo que “no se puede dejar al señor García-Page decir estupideces”.

“He visto que me insultaba el presidente de los regantes, no es que se lo perdone pero me preocupan más los piropos que echaban a la presidenta anterior”, ha indicado García-Page.

A su juicio, está claro a qué obedecen los “insultos”, ya que “ese señor tiene unos intereses totalmente distintos a los que tengo yo y, además, los que yo represento son públicos”.

El presidente de Castilla-La Mancha ha considerado “una desvergüenza” que se haya publicitado “a bombo y platillo” los planes hidrológicos a la vista de cómo están los ríos y ha confiado en que si hay un “giro” en la política en España también derive hacia una política “mucho más sostenible y equilibrada”, que no se base en “expoliar” ríos.

Con todo, García-Page ha dicho que “nunca” apostará por un modelo de ruptura con Levante sino que busca un avance progresivo que incluya, por ejemplo, a las desaladoras construidas con 550 millones de euros de todos los españoles.