PSOE: Este plan Chamartín es “mejor” y “menos especulativo” que el anterior

La portavoz del PSOE-M en el Ayuntamiento de Madrid, Purificación Causapié, ha asegurado que el proyecto acordado por el Consistorio, Fomento y la promotora privada Distrito Castellana Norte (DCN) para la operación Chamartín es “mejor” y “menos especulativo” que el del Gobierno de Ana Botella (PP).

En declaraciones a los periodistas, Causapié ha explicado que su grupo tiene que estudiar “con detenimiento” el proyecto, que intentará mejorar“, pero ha asegurado que lo que hoy se ha conocido sobre la propuesta es ”mejor“ al reducir la edificabilidad de 3,3 millones de metros cuadrados a 2,6.

Los socialistas recogerán además las reflexiones de los vecinos de Chamartçín y Fuencarral.

Para la portavoz socialista se mejora el número de viviendas, un total de 10.500, las que tendrán un fin social -el 20 % de ellas serán de protección oficial- así como los equipamientos y zonas verdes incluidos en este proyecto.

“El PSOE tenía razón cuando pensó que era posible una negociación que diera como resultado un mejor proyecto para Madrid”, ha asegurado la portavoz, quien ha añadido que este proyecto explota menos el suelo como “especulación”.

Preguntada por las diferencias internas de Ahora Madrid respecto a este desarrollo urbanístico, que debe votarse en el Pleno municipal, ha dicho desconocer “las posiciones internas” de los concejales de Manuela Carmena.

Además, la socialista ha abogado porque el Ejecutivo municipal no invierta solo en el norte de la ciudad sino que lo haga también en el resto de distritos para lograr un mayor equilibrio territorial entre el norte y el sur de la ciudad.

El proyecto urbanístico anunciado hoy, que prevé también dedicar un millón de metros cuadrados a oficinas y reformar la estación de Chamartín, debe ser aprobado inicialmente en Junta de Gobierno para su traslado, tras el perceptivo periodo de alegaciones, al Pleno.

Además, para su aprobación definitiva es necesario que el plan aprobado en Pleno cuente con el visto bueno de la Comunidad de Madrid, al suponer una modificación puntual del Plan de Ordenación Urbana (PGOU).