Temer dice que no ser candidato sería un acto de “cobardía”

El mandatario de Brasil, Michel Temer, aseguró en una entrevista publicada hoy por la revista Istoé que no aspirar a la reelección en los comicios presidenciales del próximo octubre sería un acto de “cobardía”.

“Creo que sería una cobardía no ser candidato”, sostuvo el jefe de Estado, quien este mes admitió por primera vez la posibilidad de disputar la carrera electoral.

Desde que asumió la presidencia brasileña, en mayo de 2016 para sustituir a la destituida Dilma Rousseff, de quien era vicepresidente, Temer había dicho que no pretendía intentar la reelección y que su intención es dejarle a su sucesor el país con las cuentas públicas saneadas y listo para crecer de forma sostenible por varios años.

No obstante, el líder del partido del Movimiento Democrático Brasileño ha ido suavizando su postura en las últimas semanas y “de un mes y medio hacia aquí” ha dejado en abierto su postulación para la reelección.

“Al principio creíamos que alguien sería candidato del Gobierno con esa misión de defender el Gobierno. Ahora, si nadie va a defender al Gobierno, a dar continuidad a lo que hicimos, yo mismo lo hago”, aseveró.

El presidente aseguró que su Gobierno consiguió “recuperar” un país que estaba “literalmente quebrado” y enfatizó que necesita mostrar “lo que está siendo hecho”.

No obstante, en caso de confirmarse su candidatura, Temer enfrentaría una disputa electoral con una bajísima popularidad que el mandatario justifica por el hecho de “no adoptar ninguna medida populista” durante su Gobierno.

La carrera electoral cuenta de momento con unos quince precandidatos, pero todas las encuestas otorgan una amplia ventaja al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), condenado en segunda instancia a 12 años de cárcel por corrupción pasiva y lavado de dinero.

“Hoy Lula lidera las encuestas, pero las encuestas abarcan cerca del 40 % del electorado. Lula tiene el 20 %. Él tiene 20 % de 40 %. El resto del electorado todavía no se ha definido”, explicó.

Temer reconoció que Lula “tiene prestigio” y “tiene voto”, pero recordó que el hecho de ser condenado en segunda instancia puede inhabilitarle políticamente de cara a las elecciones del 7 de octubre.

En la entrevista, el presidente volvió a rechazar las acusaciones de corrupción que han sido vertidas en su contra y negó haber recibido sobornos de una empresa portuaria a cambio de la firma de un decreto que beneficiaba a la compañía, un caso por el que está siendo investigado.

“Intentaron derribarme tres veces, esta es la tercera ola de acusaciones”, dijo.