El canciller de Irán visita a Nicaragua “para estrechar relaciones”

El ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, llegó este domingo a Nicaragua, donde se espera se reúna con el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, “para estrechar relaciones”, informó el Gobierno local.

Zarif arribó esta tarde a Managua procedente de Venezuela, donde coincidió con su par de Nicaragua, Denis Moncada, en una reunión ministerial del Movimiento de países No Alineados (Mnoal).

El Gobierno de Nicaragua no brindó detalles sobre la agenda de Zarif en Nicaragua.

La visita del diplomático iraní a Nicaragua forma parte de una gira que lo llevó a Nueva York y Caracas, y que continuará posteriormente con Bolivia.

Al igual que el de Irán, los Gobiernos de Nicaragua, Venezuela y Bolivia son conocidos por sus confrontaciones con Estados Unidos.

El Ministerio de Exteriores de Irán denunció que Estados Unidos impuso límites de movimiento a Zarif, durante su estadía en Nueva York, a inicios de la semana, donde visitó la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la oficina de la misión diplomática iraní.

Una vez en Venezuela, el representante de Irán afirmó que una “nueva ola de aventurerismo unilateral” de Estados Unidos amenaza la estabilidad mundial.

Se trata del mismo reclamo que Ortega ha hecho a Estados Unidos desde su primera etapa como presidente de Nicaragua, de 1980 a 1990, y que acentuó con el estallido sociopolítico local de 2018, el que ha interpretado como un “golpe de Estado fallido”, y que cree es apoyado por el Gobierno de Donald Trump.

Al igual que Ortega, el líder supremo de Irán, Ayatolá Alí Jamenei, ha visto cómo Estados Unidos impone sanciones económicas a sus allegados, que en el caso del nicaragüense incluyen a su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, su hijo Laureano Ortega Murillo, y su consuegro, el jefe de la Policía, Francisco Díaz, por corrupción y violación a los derechos humanos.

Se espera que Zarif ofrezca el respaldo de Irán a Ortega, quien es rechazado por una aparente mayoría de nicaragüenses desde el estallido social en su contra en abril de 2018, por ataques armados del Gobierno contra civiles, con saldos letales.

La crisis de Nicaragua ha dejado unos 326 muertos en 15 meses, según datos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que responsabiliza al Gobierno por crímenes “de lesa humanidad”. Organismos locales cifran el total en 594. El Gobierno admite 200.

Un proceso de aplicación de la Carta Democrática Interamericana contra Nicaragua está en marcha en la Organización de los Estados Americanos (OEA), por rompimiento del orden constitucional, y de ejecutarse la suspendería del organismo.