IU intenta salvar su presencia en las listas unitarias con Podemos en Cataluña y Galicia
Izquierda Unida hace malabares para salvar su presencia en las listas unitarias en Galicia y Cataluña. La situación tras la ruptura de las negociaciones con Podemos para una candidatura de confluencia en ambas regiones es bipolar: apoyar a su candidato a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, mientras se integran en una candidatura en la que habrá personas que pidan el voto para Pablo Iglesias, cuyo partido también está padeciendo la singularidad nacional que le llevó, precisamente, a aceptar en ambas regiones lo que no quería para el resto del Estado.
Donde más complicado lo tiene IU es en Cataluña. A los malos resultados cosechados por Catalunya Sí que es Pot en las elecciones del 27S se suma un ruido de fondo entre las bases de EUiA. Algunas asambleas del partido hermano de IU en Cataluña han aprobado resoluciones contrarias al acuerdo o que buscan rehacer sus términos. Estos movimientos vienen precedidos de una resolución del PSUC-viu (el referente catalán del PCE) en la que se asegura que “EUiA no podrá participar en una opción electoral que confronte en el resto del Estado con IU”.
Las críticas son, de momento, minoritarias. El PSUC no es la única fuerza comunista en Cataluña, donde la división en este sector es histórica. Precisamente, el coordinador nacional de EUiA, Joan Josep Nuet, es el secretario general del Partit dels Comunistes de Catalunya (PCC). Nuet formó parte de la lista unitaria el 27S y logró acta de diputado. El líder de EUiA se sentará así en el Parlament en un grupo junto a Podemos. Y ha apostado claramente por repetir la experiencia el 20 de diciembre.
Este mismo jueves, EUiA ha emitido un comunicado en el que reclama a su militancia que apoyen a Alberto Garzón en las primarias de Ahora en Común-Unidad Popular. Además, se apuesta por una “candidatura conjunta catalana” en las generales.
La entrada de Barcelona en Comú parece clarificar las cosas. El partido de Ada Colau ha marcado unas líneas rojas que confrontan con las de Podemos: una lista eminentemente catalanista y que tenga su traslación en un grupo propio en el Congreso. Eso implicaría que los votos que lograra esa hipotética candidatura no sumarían a nivel nacional los logrados por Podemos. Ni por IU. Contabilizarían para ellos mismos. Eso sí: haría muy complicado que, en caso de no lograr los números que exige el reglamento del Congreso para un grupo propio, los diputados electos pudieran integrarse en el grupo de Podemos.
El partido de Ada Colau ya ha puesto sobre la mesa su propuesta de candidatos para las elecciones, tal y como informa Catalunya Plural.
Un galimatías jurídico que dependería, en definitiva, de la Mesa del Congreso. Un órgano cuya composición depende de los resultados electorales y que, por ejemplo, esta legislatura que ahora concluye ha permitido a UPyD tener grupo propio y se lo ha negado a Amaiur cuando ninguno de los dos cumplía los requisitos.
En Galicia la situación es similar, aunque más tranquila para IU en lo interno. Las bases de la organización no han montado el mismo revuelo que en Cataluña. Además, en Esquerda Unida quieren asegurar que la coalición Alternativa Galega de Esquerdas (AGE) sobrevive al proceso.
EU, que depende orgánicamente de la dirección federal de IU, se enfrenta al mismo problema que EUiA: apoyar una candidatura en su región que incluye a Podemos, con quien confrontará en el resto del Estado.
