Los opositores venezolanos votan sin colas en las primarias para los gobernadores

Miles de venezolanos han votado hoy sin hacer cola y como compañeros de bando político en unas primarias organizadas por la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para escoger a sus candidatos unitarios de cara a las elecciones de gobernadores que se celebrarán en octubre.

Varios centros de votación ubicados en el este de Caracas registran una afluencia baja de personas, que llegan hasta las urnas a un ritmo lento, sin necesidad de formarse en filas y en un ambiente apacible, propio de camaradas políticos.

La alianza de partidos que adversa al chavismo gobernante dijo temprano que espera lograr en esta jornada el 10 % de participación del censo electoral, equivalente a casi 1,5 millones de ciudadanos dado que cerca de 15 millones están llamados a las urnas en 19 de las 24 entidades federales del país.

Sin embargo, los coordinadores de los centros electorales consultados por Efe aseguraron que pasada más de la mitad de la jornada el total de participación era menor a la mitad de la meta fijada, y que en la mañana presentaron retrasos de una hora, en promedio, para comenzar a recibir a los votantes.

La MUD no realizó primarias en los cuatro estados (Vargas, Carabobo, Nueva Esparta y Anzoátegui), donde ya ha consensuado candidatos únicos, mientras que el Distrito Capital no escoge gobernador sino alcalde, por lo que está fuera de competencia.

Una de las plazas más preciadas para esta jornada es la del estado Miranda (litoral), que cubre buena parte del Área Metropolitana de Caracas y que es gobernada por el líder opositor Henrique Capriles, quien no pudo aspirar a una segunda reelección debido a una inhabilitación política impuesta por la Contraloría.

Los puntos habilitados para las primarias en esta entidad agrupan a decenas de miles de votantes y pese a ello la mayoría de las mesas permanecen vacías y con personal a la espera de electores, que van llegando de tanto en tanto.

Por ejemplo, en la barriada de Petare, conocida por ser la favela más grande de Latinoamérica, los 60 centros de votación habituales fueron reducidos a uno solo, y pasadas las 14.00 hora local (18.00 GMT) decenas seguían cerca del punto de votación haciendo una suerte de custodia, mientras que las mesas esperaban por nuevos electores.

La lugareña Maritza Molina, madre soltera de dos hijos, dijo a Efe que participó en estas primarias para “sacar” al presidente Nicolás Maduro y por la escasez de efectivo que desde hace meses se registra en la nación caribeña, que se ha acentuado en las últimas semanas.

“Yo siempre he votado por la oposición. No podemos permitir que el Gobierno agarre todas las gobernaciones”, indicó.

Entretanto, una decena de jóvenes que se identificó como miembros de la llamada “Resistencia” -sector más beligerante del antichavismo- protestaron en el municipio Chacao, el territorio más opositor de Caracas, para rechazar la celebración de las primarias.

Los manifestantes recriminan a la MUD haber “abandonado la calle” tras cuatro meses de protestas antigubernamentales que dejaron más de 120 muertos y cerca de 2.000 heridos, para ahora embarcarse hacia la votación de gobernadores que será regida por el Consejo Nacional Electoral (CNE) al que acusan de actuar como aliado del Gobierno.

Un total de 57 aspirantes se mide en esta contienda en la que el partido Primero Justicia (PJ) del presidente del Parlamento, Julio Borges, es la organización política con más prospectos con un total de 15, seguida por Acción Democrática (AD) con 12, Voluntad Popular con 10, Un Nuevo Tiempo (UNT) con 7 y Avanzada Progresista (AP) con 6.

Dos partidos de la MUD -Vente Venezuela, de María Corina Machado, y Alianza Bravo Pueblo (ABP) del alcalde caraqueño privado de libertad Antonio Ledezma- son contrarios a participar en los comicios al no confiar en la limpieza de un proceso para el que creen que no se dan las condiciones justas.

Las elecciones de gobernadores debían haberse celebrado en diciembre de 2016, pero fueron aplazadas en dos ocasiones por las autoridades.

La oposición venezolana tiene a varios líderes inhabilitados, presos o en la clandestinidad.