Sánchez afronta una crisis de Gobierno inminente ante la precipitación de la salida de Iglesias

Pedro Sánchez tendrá que remodelar el Gobierno la semana que viene ante la precipitada salida del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, que debe abandonar la cartera antes del 31 de marzo para poder concurrir a las elecciones convocadas por Isabel Díaz Ayuso para el 4 de mayo. La ley electoral madrileña establece que los miembros del Gobierno central no pueden ser elegidos diputados en la Asamblea regional. Iglesias, que no había reparado en esa normativa, pretendía alargar su permanencia en el Ejecutivo hasta que se acercara el arranque de la campaña el 18 de abril. Ahora asume que su salida del Consejo de Ministros es inminente -en la sesión de control de este miércoles ha anunciado que dejará el escaño en el Congreso incluso antes que la vicepresidencia- y el presidente acometerá una remodelación de la coalición.

Las ideas que manejan en Moncloa es que el del próximo martes sea el último Consejo de Ministros de Iglesias o que esa sea ya la primera reunión del nuevo gabinete, con lo que el vicepresidente segundo no tendría una despedida oficial de su paso por el Gobierno. Sin embargo, Iglesias da por hecho que participará en la próxima reunión del Consejo de Ministros y que los cambios se llevarán a cabo inmediatamente después.

Los tempos los ha precipitado el aviso que ha lanzado en Twitter un sociólogo de Metroscopia sobre la necesidad de que Iglesias salga del Gobierno antes del 31 de marzo para poder encabeza la lista de Unidas Podemos a la Comunidad de Madrid en base a la normativa electoral de la región en la que nadie había reparado.

El artículo tres de la ley electoral de la Comunidad de Madrid impide que se presenten a los comicios autonómicos “el Presidente y los miembros del Gobierno de la Nación y sus Secretarios de Es­tado”. Además, recoge en el siguiente punto que esa causa de inelegibilidad tiene que estar solventada “el mismo día de la presentación de su candidatura”. En el caso de los plazos de los comicios del 4 de mayo, las listas tienen que registrarse entre el 26 y el 31 de este mes.

Si Iglesias mantiene la cartera hasta el próximo Consejo de Ministros, fuentes gubernamentales aseguran que daría tiempo para que los cambios pactados con Sánchez se acometieran antes de las vacaciones de Semana Santa. Tras su participación en el encuentro, Iglesias presentaría su renuncia y Sánchez tendría que comunicar los cambios del Ejecutivo al rey esa misma tarde, como ocurrió en el caso de Salvador Illa. En este caso sería necesario publicar en el BOE la nueva estructura del gabinete dado que Nadia Calviño ascenderá a la vicepresidencia segunda y Yolanda Díaz sustituirá a Iglesias pero como vicepresidenta tercera. Las promesas de los cargos e intercambios de carteras, que incluirían a Ione Belarra como ministra de Asuntos Sociales y Agenda 2030 se podrían celebrar al día siguiente, víspera de jueves santo.

Además de Iglesias, también la secretaria de Estado de Migraciones, Hana Jalloul, tendrá que abandonar su cargo para concurrir como número dos de Ángel Gabilondo. El presidente quiere “reforzar” esa candidatura frente a Isabel Díaz Ayuso y presentarla como un equipo preparado para ponerse a gobernar “en 24 horas”, según expresó el propio candidato en el acto de presentación de Jalloul.

Como parte de ese refuerzo, en Moncloa han estudiado la posibilidad de que hubiera más salidas del Gobierno con destino a las elecciones madrileñas, pero en el último momento se ha descartado, según fuentes socialistas. Los flecos de la lista del PSOE de Madrid se están perfilando en estas horas.