Decretan libertad bajo fianza para el último imputado en el caso Mercasevilla

La Audiencia de Sevilla ha dejado libre bajo fianza de 60.000 euros a Domingo Enrique Castaño, exasesor municipal del PSOE encarcelado en la última rama del caso Mercasevilla, cuya familia espera reunir esa cantidad en las próximas horas.

Fuentes de su defensa han informado hoy a Efe de que la Audiencia de Sevilla notificó ayer un auto por el que fija en 60.000 euros la fianza de Castaño, cantidad cuya constitución empezó a gestionar la familia ese mismo día.

Al ser hoy un día festivo, es probable que Castaño salga de la cárcel Sevilla I mañana viernes, han señalado a Efe fuentes del caso.

Esta causa judicial se refiere al presunto pago de 30.000 euros destinados al PSOE andaluz y en ella la Guardia Civil detuvo a cuatro personas en la “Operación Madeja”, aunque solo Castaño, exasesor socialista del Ayuntamiento de Sevilla y exdirector de Vía Pública, fue encarcelado el 12 de julio.

La causa se encuentra bajo secreto sumarial, que fue renovado a comienzos de agosto por la juez instructora, Mercedes Alaya.

La Audiencia señala en su auto que 60.000 euros es una fianza “proporcional” para eludir el riesgo de fuga de Castaño en caso de quedar libre, pero a ello añaden otra serie de medidas como depositar su pasaporte y DNI, la prohibición de abandonar España y la obligación de personarse en el juzgado todos los lunes y miércoles.

Los jueces consideran demostrado que el excesivo incremento patrimonial de Castaño estuvo relacionado con “actividades ilícitas”, mediante la percepción de “cuantiosas dádivas” a cambio de la adjudicación a dos empresas de contratos municipales, pero el auto añade que la previsible extensión de la investigación en el tiempo convierte en “desproporcionada” la prisión provisional del acusado.

A ello añaden que Castaño conocía desde hace más de un año que se le estaba investigando en el caso Mercasevilla, por lo que ya habría tenido tiempo de eludir la acción de la justicia.

Junto a ello, su abogado alegó que Castaño y su esposa -también detenida en la misma operación- tienen como única fuente de ingresos el ejercicio de la abogacía y tienen una hija de 2 años que supone un arraigo importante para no intentar fugarse.

Esta nueva rama del caso Mercasevilla se une a la referida a la petición de un cohecho de 450.000 euros como condición para adjudicar la Escuela de Hostelería de la lonja, el referido al delito societario en la empresa municipal, el centrado en la venta “fraudulenta” de los terrenos del mercado -en el que también está imputado Castaño- y el que investiga los ERE de 2003 y 2007.