De baja laboral por “golpe de calor” en un centro de salud de Mairena del Aljarafe: “En estas condiciones no se puede trabajar”

En el centro de la imagen, Reyes Castillo, la trabajadora que ha sufrido una lipotimia por el calor: a las 8.30 el termómetro del centro supera los 30 grados

Sara Rojas

1

Cuando Reyes Castillo llegó el martes a su puesto de trabajo en la tercera planta del centro de salud Clara Campoamor (Mairena del Aljarafe), eran las 7.45 h y el termómetro marcaba ya 33 grados. Conforme transcurría la mañana, “cada vez me encontraba peor”, hasta que alrededor de las 14.00 h sintió que “me desmayaba”. Fue entonces cuando la asistieron los médicos de este centro sanitario del Aljarafe sevillano, quienes valoraron que se trataba de un “accidente laboral” y emitieron la baja de la trabajadora por “golpe de calor”, tal y como consta en el juicio clínico del parte médico al que ha tenido acceso SevillaelDiario.es.

Mientras se recupera desde casa, Reyes reconoce que “aquello es horroroso”, en alusión al intenso calor que sufren desde primera hora de la mañana porque el aire acondicionado “no funciona correctamente”. Trabaja como administrativa en la unidad de salud mental del citado centro en Mairena del Aljarafe desde marzo y asegura que “nunca” había sufrido un episodio similar en ninguno de sus anteriores trabajos. Por sus compañeras sabe que no es la primera vez que alguien se desmaya en los pasillos o consultas de esta unidad, donde se registran las temperaturas más elevadas de todo el edificio por ser la más alta y la que colinda con la azotea, según fuentes del personal médico.

De hecho, el accidente de Reyes se ha producido apenas días después de que la plantilla del centro de salud se haya concentrado para exigir una “solución definitiva” al “mal funcionamiento del sistema de refrigeración” que acumula el centro, como llevan denunciando desde hace casi una década, cuando se inauguró el centro de salud Clara Campoamor.

“Asfixiados” en plena ola de calor

De acuerdo con el personal del centro, es “recurrente” que tengan que trabajar sin aire acondicionado, como recoge el informe médico de Reyes. Lo cual deriva en que se sufra un calor “asfixiante” durante los episodios de temperaturas extremas como el que atraviesa esta semana la provincia con máximas que rozan los 44 grados. De modo que entienden que esta trabajadora de 59 años haya sido víctima de las “condiciones climáticas inadecuadas” que padecen los profesionales y pacientes que acuden a diario a la tercera planta.

“No me explico que lleven así 10 años”, confiesa en este sentido Reyes, solidarizándose con la protesta de sus compañeros y compañeras, que alertan de los estragos que ocasiona esta situación tanto para los trabajadores como para los usuarios. “Son personas que, de por sí, tienen crisis de angustia en la sala de espera en condiciones normales; imagínate con este calor”, señalan al respecto los profesionales de Salud Mental.

A la espera de que se solucione definitivamente el problema de refrigeración en el centro, la administrativa que está de baja por un golpe de calor volverá a ver al médico el lunes. Aunque asegura que quiere volver al trabajo “lo antes que pueda”, Reyes también admite su temor a que “me vuelva a dar” un episodio tan angustioso como el que vivió el martes pasado. En estos momentos, reconoce que con un ventilador y el termómetro superando los 30 grados a primera hora de la mañana, “no me veo capaz”. “No puedo ir a trabajar en esas condiciones”, lamenta.

Etiquetas
stats