Vecinos de Lora del Río denuncian la ubicación de una depuradora de aguas resicuales a “escasos 30 metros” de sus viviendas

Los vecinos de la Asociación de Vecinos Ermita de Setefilla han realizado pintadas y derribado los carteles de las obras de la depuradora.

EP

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El presidente de la Asociación de Vecinos Ermita de Setefilla, Javier Prieto, ha denunciado este martes el anuncio del inicio de las obras en septiembre de la una estación depuradora de aguas residuales (EDAR) a “escasos 30 metros” de una zona de viviendas de la pedanía de Setefilla, perteneciente al municipio sevillano de Lora del Río.

En una entrevista para Europa Press, Prieto ha indicado que los vecinos, que han asegurado haberse enterado del inicio de las obras por la colocación de carteles por parte del ayuntamiento en la zona, han “realizado pintadas” en los mismos y han asegurado sentirse “muy engañados e indignados”. Además, han advertido de que están dispuestos a “llegar a donde sea”, pues no descartan “ningún acto”.

De momento, el presidente ha anunciado que van a intentar “paralizar las obras”, para lo que van a denunciar las mismas ante la Guardia Civil, así como a pedir ayuda a Ecologistas en Acción y a interponer una denuncia ante la Fiscalía de Medioambiente. Por otra parte, Prieto también ha indicado que presentarán un recurso ante el Ayuntamiento que solicite la “penalización de las obras”.

El presidente ha explicado que el problema comenzó en 2009, cuando el gobierno local del PSOE de aquel momento inició los trabajos de instalación de esta depuradora en la misma zona --concretamente, junto a un parque infantil-- para dotar al pueblo de este servicio que, hasta la actualidad, se ha sustituido por el vertido de las aguas residuales al arroyo Zancarrón a través de una tubería.

Entonces, el PP, actual partido en el gobierno local, sostuvo que era “una barbaridad” y se opuso al proyecto, mostrándose del lado de los vecinos, tal y como ha explicado Prieto. La presión vecinal y del resto de partidos de la oposición, entre ellos IU, logró paralizar las obras.

Más de una década después, Prieto ha señalado que el actual alcalde, Antonio Miguel Enamorado (PP), “cambia de opinión” y justifica la ubicación de la depuradora al tratarse de un “depósito cerrado que funciona por decantación”.

No obstante, el máximo representante de los vecinos ha alegado que el EDAR requiere un mantenimiento que supone “abrirlo cada tres meses”, lo que produciría “mal olor”, por lo que “no se puede poner en la puerta de nuestras casas”.

Además, Prieto también ha criticado que el proyecto, que en su momento costó “unos 400.000 euros” al Consistorio, ha tenido que “volver a licitarse para la mano de obra”, lo que ha supuesto un nuevo gasto público de 183.000 euros.

Conscientes de que la instalación de la depuradora es “muy necesaria” para el municipio, la solución que han propuesto desde la asociación vecinal pasa por elevar a Pleno una modificación del proyecto “por motivos sociales y de salubridad”. Una opción ante la que el gobierno se opone por “cuestiones económicas”, según Prieto, pues “desplazar la ubicación incrementa la obra en más de 150.000 euros”.

Por su parte, respecto al motivo de la reanudación del proyecto, el presidente de la asociación lo ha relacionado con “problemas de ilegalidad para entregar licencias de construcción” en una urbanización ubicada a la entrada de la pedanía debido a la “carencia de una depuradora”. En este sentido, Prieto ha asegurado que “de pronto, estos solares se han vendido en seis meses después de 12 años”.

“No estamos defendiendo ninguna posición política, estamos defendiendo nuestras casas y el parque de nuestros hijos”, ha concluido el presidente de la asociación vecinal.

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