Costa Rica tramita con el FMI un crédito de 508 millones de dólares ante COVID-19

El Gobierno de Costa Rica informó este viernes que tramita un crédito de 508 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que tiene como objetivo hacer frente a la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2 que afecta al mundo.

“Este programa con el FMI es de fundamental importancia para Costa Rica, no solo por los recursos que aportaría para apoyar las finanzas públicas, sino también por el respaldo que representa a las políticas económicas del país para responder a las consecuencias de la pandemia, afianzar la estabilidad macroeconómica, asegurar la sostenibilidad de la deuda pública, e impulsar el crecimiento económico de mediano y largo plazo”, comentó en un comunicado el presidente del Banco Central, Rodrigo Cubero.

Altas autoridades del Gobierno costarricense sostuvieron el miércoles y jueves reuniones virtuales con una misión del FMI encabezada por su directora de la división de Centroamérica del Departamento del Hemisferio Occidental, Inci Otker.

El interés de Costa Rica es acceder a una línea rápida de financiamiento de 508 millones de dólares para atender la emergencia provocada por la pandemia de la COVID-19 y el FMI dará una respuesta a finales de este mes, indicó la Casa Presidencial.

“El Instrumento de Financiamiento Rápido está a disposición de los países miembros del FMI que enfrenten un choque de balanza de pagos. El mecanismo de desembolso rápido es ideal para proveer asistencia financiera ante el fuerte impacto negativo que está causando la pandemia de COVID-19 a la economía mundial”, señala el comunicado del Gobierno costarricense.

Más de la mitad de los 189 países miembros del Fondo Monetario Internacional (FMI) han solicitado ya asistencia financiera al organismo ante la emergencia desatada por la pandemia del coronavirus, según datos del organismo.

El jueves, el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, publicó en sus redes sociales y en un comunicado que propuso al FMI tasas de cero interés y fijas, así como plazos largos para los créditos a los países en desarrollo o de renta media para hacer frente a la pandemia.

El crédito con el FMI se suma a otro aprobado por el Congreso en marzo pasado por 500 millones de la Corporación Andina de Fomento (CAF), cuyo fin original era el pago de deuda cara, pero que ahora se utilizará para atender la crisis que está generando el COVID-19.

El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) también otorgó en marzo a Costa Rica 90 millones de dólares para que dos bancos estatales apoyen a los pequeños y medianos empresarios afectados por la crisis sanitaria.

El Gobierno también ha anunciado un plan de subsidios para las personas que han visto reducida o suspendida su jornada laboral en la empresa privada, o incluso para quienes han perdido sus ingresos en el sector informal.

Costa Rica contabilizaba hasta el jueves 642 casos del coronavirus, de los cuales 74 personas ya se han recuperado y 4 han fallecido.

Este país mantiene cerradas sus fronteras al ingreso de extranjeros desde mediados de marzo, lo que ha significado un duro golpe al turismo, uno de sus motores económicos.

Las autoridades también mantienen cerradas las playas, los parques nacionales, los bares, las discotecas, los casinos y otros sitios donde se pueden presentar aglomeraciones de personas.

Pueden operar a un 50% de su capacidad y con estrictas medidas higiénicas los restaurantes, las cafeterías y otros locales comerciales pequeños.

Costa Rica no ha decretado una cuarentena obligatoria a su población, con excepción de quienes ingresan al país desde el exterior, pero sí ha limitado la circulación de vehículos por franjas horarias y números de placa.