Los edificios más altos de Barcelona y a los que ha superado la Sagrada Familia

Desde hace unos días, la Sagrada Familia ya es oficialmente la iglesia más alta del mundo, superando por algo más de un metro a la de Ulm, en Alemania, tras la instalación de la primera parte de la gran cruz que coronará la torre central dedicada a Jesucristo. La pieza colocada corresponde al brazo inferior de una cruz que tendrá una altura total de 17 metros (equivalente aproximado a un edificio de cinco plantas). La obra que ideó y comenzó Antoni Gaudí mide actualmente 162,91 metros, una cima que llegará a los 172,5 metros una vez completada la cruz. De ahí que cada vez sea mucho más alta que otros grandes edificios de la capital catalana.

A pesar de que la gran obra de Gaudí es y parece que será durante mucho tiempo el edificio más alto de Barcelona, también es cierto que en las últimas décadas el área metropolitana de la capital catalana ha experimentado un crecimiento exponencial en la construcción de rascacielos. Se trata de una zona con innovadoras torres que superan, en su gran mayoría, los 100 metros de altura, ofreciendo un nuevo aspecto al paisaje urbano que atrae a miles de visitantes anualmente. Estos hitos arquitectónicos se distribuyen estratégicamente en zonas clave como el Puerto Olímpico, el distrito tecnológico 22@ y la Plaça d’Europa, en la vecina y colindante población de L’Hospitalet de Llobregat.

Liderando la lista de dichas construcciones elevadas se encuentran dos titanes del Puerto Olímpico, erigidos ambos con motivo de los Juegos Olímpicos de 1992. El Hotel Arts Barcelona y la Torre Mapfre comparten cima, ostentando cada uno 154 metros de altura. El Hotel Arts, diseñado por el arquitecto colombiano Bruce Graham, consta de 44 plantas y destaca por su diseño de vidrio en tonos verdes y grises, rodeado por una estructura de hierro blanco. Propiedad de Deutsche Bank y sede de un lujoso hotel de la cadena Ritz, también alberga pisos de lujo en sus nueve plantas superiores. Justo al lado se alza la Torre Mapfre, con 40 plantas dedicadas enteramente a oficinas. Su construcción la convirtió, en su momento, en la segunda más alta de España, solo superada por la Torre Picasso de Madrid.

Pisándole los talones, uno puede maravillarse también por las dimensiones de la icónica Torre Glòries, anteriormente conocida como Torre Agbar. Con 144 metros de altura y 34 plantas sobre rasante, se trata de una estructura obra del arquitecto Jean Nouvel en colaboración con Fermín Vázquez Arquitectos. Se buscó huir del concepto clásico de rascacielos, inspirándose precisamente en la obra de Antonio Gaudí y los campanarios de la Sagrada Familia, y fue concebida para parecer que emerge del suelo como un gran géiser. Su envolvente de vidrio y aluminio le ha valido ser un emblema del distrito tecnológico 22@. En 2024, la Torre Glòries fue incluida en la World Federation of Great Towers, consolidando su reconocimiento global.

Otro gran edificio es el Habitat Sky, un rascacielos obra en este caso del arquitecto francés Dominique Perrault. Alcanza los 116 metros a lo largo de 31 plantas y es reconocido por su complejidad técnica, con el espacio de habitaciones de hotel en voladizo sobre la entrada. Es el segundo hotel más alto de la ciudad. Formando parte del distrito económico metropolitano se encuentran las llamadas Torres Fira, ubicadas en Hospitalet de Llobregat. El conjunto está compuesto por el Hotel Porta Fira, de 113 metros y 26 plantas, que se alzó con el Premio Emporis al Mejor Rascacielos de 2010 gracias a su llamativo diseño de fachada roja curva. Su “hermana”, la Torre Realia BCN, mide 112 metros y se dedica exclusivamente a oficinas. Ambas estructuras fueron diseñadas por el arquitecto japonés Toyo Ito.

Una joya de 1970

Otra de las joyas de la elevada arquitectura barcelonesa es el Edificio Colón. Inaugurado en 1970, con sus 110 metros de altura y 28 plantas, fue el primer edificio en toda Catalunya en superar la barrera de los 100 metros. Situado en la zona del casco antiguo de la ciudad, su diseño, a cargo de Josep Ribas González, combina paneles de hormigón con vidrio, y cuenta con una vistosa planta hexagonal que corona la torre. Compartiendo altura con el dicho edificio está la Torre Diagonal Zero Zero (también conocida como Torre Diagonal Zero o Diagonal One), mide igualmente 110 metros de alto y cuenta con 25 plantas de oficinas. Diseñada por Enric Massip-Bosch, esta gran sede corporativa de Telefónica en tierras catalanas es un ejemplo de arquitectura con tecnología punta, destacando su fachada de enrejado construida en solo ocho meses en 2011.

El Hotel Barcelona Princess, construido con motivo del Fórum Universal de las Culturas 2004, consta de 26 plantas que alcanzan los 109 metros y se distingue por su curiosa planta triangular y líneas de color naranja sobre su fachada de vidrio. Por último, la Torre Puig, situada en Hospitalet de Llobregat, alcanza también los 109 metros de altura y 22 plantas. Diseñada por Rafael Moneo, es la sede de la empresa de perfumería y cosmética Puig, y su diseño singular presenta paneles de vidrio oscuro con revestimientos blancos que le otorgan un aspecto puro.

Hoteles, sedes corporativas o centros de innovación seguirán impresionando a todo agradecido viajero o visitante que alce la vista en un paseo por Barcelona, aunque sea la Sagrada Familia la que supere todos los rascacielos mencionados. Se espera que esta obra de Gaudí, coincidiendo con el centenario de la muerte de Antoni Gaudí, vea la culminación de la torre de Jesucristo durante 2026, hecho que marca el inicio de la fase final de la construcción de la torre central del templo. Será en todo caso un hito histórico que se producirá durante una efeméride en la que se realizarán diferentes actos conmemorativos.