Por fin una encuesta del CIS resuelve el eterno conflicto español: tortilla de patatas, ¿con o sin cebolla?

La tortilla de patatas es un plato muy versátil

Adrián Roque

1

Hay debates que trascienden generaciones, que aparecen en la cena de Navidad, en el descanso del trabajo o mientras se ve un partido de fútbol: uno de los más clásicos en España es la eterna discusión sobre la tortilla de patatas, y más concretamente, si debe llevar cebolla o no. Durante décadas, este dilema ha dividido a familias, bares y grupos de amigos, generando conversaciones apasionadas y, a veces, incluso ligeros conflictos.

Ahora, por primera vez, una encuesta nacional realizada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) pone números a esta guerra gastronómica y ofrece datos contundentes que dejan pocas dudas: la tortilla con cebolla se lleva el gato al agua.

Cebolla, la vencedora indiscutible

Según el CIS, tres de cada cuatro españoles (un 75%) prefieren la tortilla de patatas con cebolla, un porcentaje que evidencia la fuerza de esta opción frente al bando que defiende la tortilla sin hortaliza, que se queda con solo una cuarta parte de los votos.

La encuesta demuestra que, aunque la discusión siga viva en bares y reuniones familiares, el consenso a nivel nacional se inclina claramente hacia la versión que incluye cebolla. Para muchos, es un ingrediente que potencia sabor y jugosidad, y que convierte cada bocado en una experiencia más completa.

El punto de cocción, el nuevo frente abierto

Si en el debate sobre la cebolla hay casi unanimidad, en lo que respecta al punto de cocción de la tortilla, los españoles se dividen más. El 53,3% de los encuestados admite que le gusta la tortilla “poco hecha”, jugosa y con el huevo ligeramente líquido, la versión que a menudo genera comentarios sobre si está cruda o no.

En el extremo opuesto, un 28,9% se decanta por la tortilla bien cuajada, firme y sin rastro de huevo líquido, más cómoda de cortar o preparar en sándwich. Entre ambos polos, un 15,5% busca un término medio, una textura equilibrada que combine jugosidad con consistencia.

Estos resultados revelan un cambio de sensibilidad: cada vez más personas se acercan a la tendencia de la alta cocina, donde la tortilla jugosa gana prestigio y rompe con la idea de que solo la versión sólida es la correcta.

Un plato que sigue generando pasión

Más allá del sabor, la tortilla de patatas es un símbolo cultural, un plato que despierta pasiones como si se hablara de fútbol o política. La encuesta del CIS simplemente traduce en números lo que durante años ha sido un debate de bar y de cocina doméstica.

El resultado es claro: la mayoría defiende la tortilla con cebolla, mientras que una minoría mantiene que la versión sin hortaliza es la auténtica. En cuanto al punto de cocción, el consenso aún está lejos, aunque la tendencia parece inclinarse hacia la tortilla jugosa.

Sea como sea, el conflicto español más delicioso sigue vivo, y probablemente seguirá generando conversaciones durante muchos años más. Porque en España, hablar de tortilla de patatas es mucho más que hablar de comida: es una tradición que une y divide a partes iguales.

Etiquetas
stats