Denuncian que hay hospitales fuera de servicio en la zona del supuesto ataque químico

La ONG Unión de las Organizaciones de Socorro y Auxilio Médico (UOSSM) denunció que los últimos hospitales que funcionaban en la zona de Siria donde se produjo hoy un supuesto ataque con armas químicas están fuera de servicio por bombardeos, por lo que no hay posibilidad de atención a las víctimas.

“Lo que hace todavía más terrible la situación de hoy, con un número tan elevado de víctimas, es la serie de ataques contra hospitales en la región. Hoy y pocas horas después del ataque químico, el hospital Rahma, en Darkush, el último que funcionaba en la zona, fue blanco de un ataque con barriles explosivos”, afirmó la organización.

Agregó que hace dos días el hospital de Marrat al-Nu'man, el único equipado para recibir a eventuales víctimas de una acción química, también fue bombardeado y quedó fuera de servicio.

Sobre los supuestos ataques químicos de hoy en la localidad de Jan Shijún, al sur de la provincia de Idleb (norte de Siria), la UOSSM sostuvo que, conforme a los datos que ha recogido, la sustancia utilizada fue gas sarín

“Las primeras informaciones apuntan al uso de gas sarín o de ese tipo”, indicó la ONG, a la que autoridades sanitarias de Idleb habrían revelado un balance de más de cien muertos y 400 heridos, mientras que el Observatorio Sirio de Derechos Humanos habla de 58 fallecidos, entre ellos once menores, y de decenas de heridos por el ataque de aviones no identificados contra Jan Shijún

Algunas de las víctimas presentaban síntomas como espuma saliendo por la boca y enrojecimiento de ojos, además de dificultades respiratorias.

La ONG señaló que tres de sus colaboradores se vieron afectados por el gas, cuando intentaban rescatar a otras personas.

De acuerdo con esta organización, sólo en marzo pasado once miembros de equipos sanitarios murieron a causa de la violencia en Siria.

Un médico fue asesinado por el grupo yihadista Estado Islámico, mientras que el resto murió en bombardeos que, según la ONG, parecían ser responsabilidad de las fuerzas militares sirias y rusas.