Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
El ataque limitado de Israel a Irán rebaja el temor a una guerra total en Oriente Medio
El voto en Euskadi, municipio a municipio, desde 1980
Opinión - Vivir sobre un polvorín. Por Rosa María Artal
Sobre este blog

Los contenidos de este blog son facilitados por Comisiones Obreras Andalucía

Andalucía ante un Brexit incierto

Bruselas rebaja el crecimiento de la eurozona al 1,1 % en 2019 y al 1,2 % en 2020

Nuria López Marín

El ansiado proyecto europeo para construir una Europa Social se tambalea tras los duros años de crisis en los que los poderes económicos, con una falta absoluta de políticas sociales, han tomado las riendas en detrimento de los estamentos democráticos elegidos mediante sufragio por la ciudadanía europea. Resultado de la toma de decisiones en esos años nos encontramos con que las opciones políticas antieuropeístas han crecido como lo han hecho los euroescépticos y con que Reino Unido ha acordado en Referéndum salir de la Unión Europea.

Europa ahora aborda una negociación interminable con Reino Unido, que de nuevo se vuelve a encontrar en una prórroga, pero en CCOO estamos convencidos de que la solución no sólo debe venir de cómo se aborda la salida de un Estado miembro, sino de cómo se consolida un nuevo contrato social que dé soluciones desde el principio bajo el prisma de la solidaridad, garantizando igualdad y cohesión social, y evitando el crecimiento de los movimientos xenófobos e individualistas que generan odio y fanatismo.

Un impacto millonario

El Brexit es, por tanto, el gran reto que debe afrontar la Unión Europea, y es necesario conocer en profundidad por qué se va y evitar que otros países miembros adopten el mismo camino.

España y, en particular, Andalucía, no quedarán indemnes con esa salida, de ahí la necesidad de poner en marcha un plan de contingencia para abordar la salida de Reino Unido, una salida cuyas consecuencias económicas serán en función de cómo se produzca ésta, y que sólo en el caso de nuestra tierra puede tener un impacto de 500 ó 1.500 millones de euros.

Cabe recordar que el Gobierno andaluz ha aprobado un plan con 112 medidas para afrontar el Brexit, que abrieron a la negociación y a la aportación de los agentes económicos y sociales, y que debe ser una oportunidad, y no pensar sólo cómo apoyamos a las empresas que vean reducidos sus beneficios o cómo bonificamos los despidos que se puedan producir como consecuencia del cierre de mercados.

Oportunidades

El Brexit también tiene que ser una oportunidad, una oportunidad ante la que Andalucía abra la puerta a nuevos mercados, especialmente en el sector hortofrutícola, donde nuestra tierra, además de favorecer el comercio con Reino Unido que, en parte dependerá de los acuerdos comerciales que se suscriban para su salida, debe abrirse a la promoción en otros mercados. Los sectores más afectados son los vinculados con el sector servicios y la industria, y en este último, tanto aeronáutico como automovilístico, Andalucía puede y debe ser una opción para las empresas que se estén planteando abandonar el Reino Unido después de la ruptura con la Unión Europea.

Pero para atraer inversión, lejos de lo que dice el Gobierno, no sólo es necesario ofrecer reducción de las trabas administrativas. Los grandes inversores requieren especialmente estabilidad económica y social y eso solo puede llegar de la mano de la concertación y la gobernanza compartida con los agentes económicos y sociales; de una forma distinta de hacer las cosas a como las está haciendo el Gobierno andaluz, que ha presentado presupuestos que no abordan las inversiones necesarias en infraestructuras, o no ponen en marcha medidas para paliar el déficit de formación que tienen los trabajadores y trabajadoras andaluzas ante nuevos procesos de producción, especialmente en el ámbito de la digitalización. Esas también son las cosas que el Gobierno debe abordar en el plan estratégico.

En cualquier caso, esto no debe ser una disputa entre el Gobierno de España y el de Andalucía por determinar quién es el primero en aprobar un plan estratégico, sino una colaboración entre las dos administraciones fortaleciendo el diálogo social con los agentes sociales y económicos, para dar seguridad y garantizar la protección a las personas trabajadoras, tanto a los españoles que trabajan en Gibraltar o en Reino Unido, como a los británicos que viven en España.

Por ello, desde CCOO pedimos que esta realidad no se trate de solventar sólo con acciones puntuales en el campo de Gibraltar, -que también son necesarias-, sino que se sea más ambicioso en la búsqueda de inversiones, -que en parte corresponden al Gobierno de España-, que desarrollen el eje central del Corredor Mediterráneo o la ampliación del aeropuerto de Jerez y permitan a medio plazo reducir las altas tasas de desempleo que tenemos en la zona. Si el Brexit es inevitable, busquemos desde el consenso la fórmula para que también sea una oportunidad.

Sobre este blog

Los contenidos de este blog son facilitados por Comisiones Obreras Andalucía

Etiquetas
stats