Un informe cifra en más de 3.300 millones el despilfarro en infraestructuras en Aragón

La Asociación de Geógrafos Españoles (AGE) estima en 3.325 millones de euros el dinero despilfarrado en la comunidad autónoma en infraestructuras inadecuadas, innecesarias, sobredimensionadas o infrautilizadas entre 1986 y 2016, según recoge en su libro Aproximación a la geografía del despilfarro, en el que estudia ese tipo de actuaciones en todo el país.

El balance resulta desolador para el contribuyente, ya que el dinero mal gastado en ese periodo asciende a 80.526 millones de euros. El grueso se lo lleva la Administración central, con 45.920 millones, mientras que Aragón ocupa el sexto puesto entre las comunidades, solo por detrás de Cataluña (9.160), Madrid (7.723) y Valencia (5.936), y por delante de Andalucía (2.657) y Asturias (2.380).

Las estimaciones de los geógrafos incluyen los proyectos inadecuados de los gobiernos autonómicos y los ayuntamientos y, en el caso de Aragón, algunas actuaciones en cuya financiación colaboró el Ejecutivo central, como el complejo de la Expo de 2008.

La gran ‘caja vacía’ de la Expo de Ranillas

El listado de las infraestructuras que señala la AGE está encabezado, precisamente, por la Expo, a la que atribuye un coste total de 2.250 millones de euros que incluye algunas infraestructuras de comunicación ejecutadas durante los preparativos, como el cierre del cuarto cinturón, y de la que desgaja algunas obras como la construcción de la Torre del Agua, que sigue sin uso tras una inversión de 53,5 millones de euros.

El informe de AGE considera paradigmático de este tipo de actuaciones el caso de Ranillas. “Se trata de auténticas ‘cajas vacías’”, señala, entre las que “es especialmente significativo el caso del gran complejo ocioso construido en torno a la Expo del Agua 2008 en Zaragoza”.

El estudio hace referencia también al tranvía de Zaragoza, que costó 400; al embalse de La Loteta, presupuestado en 86 y diseñado para suministrar a la capital aragonesa agua procedente del embalse de Yesa, en el prepirineo, así como dos equipamientos culturales cuyos proyectos estuvieron en su día rodeados de polémica: el museo Pablo Serrano (21,5) y la recuperación del teatro Fleta (40), que sigue sin finalizar.

El estudio incluye dos infraestructuras ubicadas en Teruel como son Motorland (67) y la Vïa Perimetral de la capital (17); una en Huesca, que sería el Palacio de Congresos (24), y, por último, el centro deportivo de La Muela, que costó 19.

Los 347 millones del Plan de Depuradoras

Por último, el informe de la Asociación de Geógrafos Españoles reseña el Plan de Depuración como uno de los casos de despilfarro “en torno a la gestión del agua”.

Atribuye un coste de 347 millones de euros a “la ‘burbuja” de las depuradoras en Aragón`“, a la que sitúa al mismo nivel que la desaladora de Escombreras, ”la deriva del Canal de Isabel II y el despilfarro (y la corrupción política) asociada a la entidad que gestionaba la depuración de las aguas residuales de la propia ciudad de Valencia y de 17 municipios de su área metropolitana“.

Esta cifra se suma a los 2.978 millones de euros que suman el resto de infraestructuras incluidas en el estudio, el impulso de la mayoría de las cuales vincula con “estrategias y proyectos impulsados por responsables políticos que finalmente han resultado una carga que ahora resulta difícil de gestionar”.