Jaume Peiró y Álex González preparan una completa expedición por Sudamérica

El valenciano Jaume Peiró y el madrileño Álex González han decidido aunar fuerzas de cara a este próximo verano y llevar a cabo una larga expedición de tres mes de duración (junio, julio y agosto) que les llevará a Brasil, Perú y Bolivia.

La idea de este viaje va más allá de lo meramente deportivo, ya que afirman que les gustaría también aportar su granito de arena a la comunidad escaladora de estos tres países y tratar de establecer un plan de cooperación mediante la organización de charlas, proyecciones, actividades con niños, etc.

No obstante, el motor principal será, sin duda, la repetición de algunas clásicas de estos países así como la búsqueda de posibles nuevas líneas.

En cuanto al viaje, Brasil será el primero de los destinos. Allí tienen previstas actividades en Pedra Riscada, Pedra Baiana, Tres Picos, Pain de Sucre y Corcovado, éstos dos últimos en Río de Janeiro. Los principales objetivos aquí serán la ascensión de Viaje de Cristal y la posible apertura de una nueva línea, respetando la ética del equipamiento, en Pedra Riscada. Igualmente han puesto la vista en una posible escalada al monte Corcovado, donde se encuentra el icónico Cristo Redentor, así como la repetición de diferentes vías en Pedra Baiana y Pain de Sucre.

Su segundo destino será Perú. Al contrario que en Brasil, la escalada en Perú la desarrollarán en un único destino, Huaraz, el corazón alpino de los Andes. Tras aclimatar en Hayun Machay intentarán la ascensión a La Esfinge (5.324 metros) por la cara este, con sus 750 metros de granito vertical cargados de diedros y fisuras perfectas.

Posteriormente, si el tiempo lo permite y la motivación persiste, atacaran el Alpamayo, una cumbre de 5.947 metros.

Finalmente, Bolivia será el tercer y último destino. Más concretamente la cadena rocosa de Quimsa Cruz, un mar granítico de agujas y torres que, sin duda, hará las delicias de cualquier amante la escalada. Quimsa Cruz es el paraíso de la escalada de exploración, con cientos de rutas por abrir, agujas vírgenes que escalar y cumbres que coronar.

La idea es que el periplo por Sudamérica culmine en territorio andino, repitiendo vías clásicas como Don Rayo al Cuernos de Diablo (5.271 metros), ascendiendo el Monte Saturno por su cara norte y, en la medida de lo posible, llevando a cabo la apertura de nuevas líneas.