La falta de agua depurada frena la construcción de hoteles en Mogán

Estación depuradora de aguas residuales (EDAR) del barranco de Mogán

Iago Otero Paz

Las Palmas de Gran Canaria —

La estación depuradora de aguas residuales (EDAR) del barranco de Mogán está al límite de su capacidad e impide al Ayuntamiento dar licencias para la construcción de nuevos hoteles en la zona de Playa de Mogán a pesar de que el municipio, uno de los más importantes en el sector turístico de Canarias, cuenta con parcelas hoteleras para atraer inversores.

En concreto, esta EDAR tiene una capacidad de 2.000 m³ diarios y funciona al 90% de su capacidad (1.800 m³ diarios) y para diciembre de este año está previsto que se inaugure el Hotel Sol Mogán del grupo noruego Wenaasgruppen y que contará con cerca de 1.000 camas, lo que ha levantado las alarmas porque podría desbordar la depuradora.

Onalia Bueno, alcaldesa del municipio, señala que en estos momentos tienen la necesidad de ampliar la depuradora actual en 2.000 o 3.000 metros cúbicos más o construir una nueva con esta capacidad “porque si viene un inversor a pedirme licencia no se la puedo dar porque no tengo capacidad”. El problema va más allá de la inversión hotelera en Mogán porque, según la política de CIUCA, esta EDAR también limpia las aguas, además de la zona de la playa y el puerto, de la cuenca del barranco y el pueblo, por lo que un futuro crecimiento de esta parte del municipio también se encontraría con esta traba.

Bueno comenta que por el momento no tienen solución a este inconveniente ya que el Consejo Insular de Aguas, entidad encargada de la depuración, alega que no tiene presupuesto para ampliar la depuradora, por lo que están esperando a que el Gobierno de Canarias consiga fondos europeos para esta obra.

En cuanto al hotel Sol Mogán, aunque en octubre del pasado año la alcaldesa reconoció que no podrían hacer frente a la limpieza de sus aguas, ahora explica que “a día de hoy no hay ningún problema porque podemos asumirla”. Fuentes consultadas por este periódico señalan que una de las posibles soluciones, aunque complicada, sería instalar depuradoras modulares.

De todos modos, el complejo hotelero tiene que hacer público el consumo de agua y cuántos metros cúbicos verterán a la depuración para que el Consejo Insular de Aguas pueda coordinar bien el tratamiento de las mismas. No obstante, no toda el agua va a la depuradora porque también se emplea para los jardines las llamadas aguas grises.

El abastecimiento también corrió peligro

La licencia para la construcción fue otorgada en verano de 2014 cuando estaba en el Ayuntamiento el anterior grupo de gobierno. Según ha podido saber este periódico, al grupo inversor no le advirtieron de la situación a la que se enfrentaba de problemas con la depuración y por ello no consultaron con el Consejo Insular de Aguas en cuanto a los volúmenes de agua a purgar.

A las dificultades en la depuración hay que sumarle la del abastecimiento. Y es que, en un principio el Hotel Sol Mogán también vio peligrar la llegada del agua para su uso cotidiano, aunque la alcaldesa asegura que esto estará solucionado para el mes de noviembre, cuando se tiene previsto inaugurar una nueva desaladora que se está construyendo en estos momentos en Playa de Mogán que tendrá una capacidad de 1.500 metros cúbicos de agua desalada al día.

Esta planta dará servicio a todos los núcleos de población del Valle de Mogán y tendrá carácter modular, de forma que podrá crecer fácilmente en capacidad a medida que el crecimiento demográfico y la apertura de nuevos establecimientos turísticos así lo requiera. La construcción desalará el agua de mar mediante el sistema de ósmosis inversa.

El complejo alojativo se está construyendo sobre un suelo que tiene una superficie de 45.820 metros cuadrados, si bien la construida no superará los 22.800 metros cuadrados y la ocupación proyectada no alcanzará el 33% (14.864 m2). La inversión de los noruegos ronda los 100 millones de euros y para Isabel Santiago, concejala de Nueva Canarias en la oposición, el Consistorio debió de advertir de todas estas dificultades a los constructores ya que desde el momento en el que un municipio da la licencia está garantizando el agua, depuración y electricidad, hecho que no ha ocurrido en este caso.

Etiquetas
stats