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Soria se regodea con la derrota de Sáenz de Santamaría: “Me ha parecido un discurso de subsecretaria”

José Manuel Soria, el día antes de las votaciones en el Congreso del PP

Alexis González

Las Palmas de Gran Canaria —

Enemigos íntimos no, lo siguiente. José Manuel Soria no ha podido ocultar su sed de venganza hacia quien considera responsable de su salida de la política por la puerta de atrás, la exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. “Lo que he visto de la candidata me ha parecido, con todos los respetos, un discurso de subsecretaria, y el de Pablo Casado ha sido un discurso político de presidente”, soltó el exministro de Industria, Energía y Turismo a los medios de comunicación tras conocerse el triunfo de Casado en el Congreso del PP. 

El zasca del expresidente del PP canario es la guinda a su particular implicación por la candidatura de Pablo Casado, o más concretamente contra Soraya Sáenz de Santamaría. Soria se ha involucrado activamente en la campaña, ya fuera pidiendo el voto para Casado a los compromisarios canarios, reenviado por WhatsApp el vídeo anónimo de Cuéntame contra la candidata, o dejando clara sus preferencias en actos sociales, incluso delante de su sucesor en las Islas, Asier Antona. 

Precisamente el triunfo de Pablo Casado abre un periodo de incertidumbre en el PP regional, que deja además el liderazgo de Asier Antona en remojo. El grado de desapego de Soria y su núcleo duro de fieles con su sustituto en la presidencia regional del partido ha ido creciendo con el paso del tiempo, desde la dimisión del exministro por los papeles de Panamá y sus cuentas en el paraíso fiscal de Jersey.

Y lejos de amainar, ahora arrecia por el hecho de que Antona mostrara en público su apoyo a Soraya Sáenz, cuando la exvicepresidenta visitó Tenerife y Gran Canaria hace diez días. No es que Antona vaya a caer en las próximas semanas, ni que se pretenda convocar un congreso regional extraordinario, pero fuentes consultadas por este periódico empiezan a poner fecha de caducidad al presidente regional: las elecciones locales de mayo de 2019, que no auguran un buen resultado para el PP. 

Antona, como es obvio, se ha puesto a disposición de Pablo Casado con “lealtad, disciplina e ilusión” para ganar las elecciones y ha resaltado la presencia en la nueva Ejecutiva popular no solo de él mismo como presidente, sino de todos los diputados y senadores. Pero ya es sintomático que con la lista de Casado saliera elegida María del Carmen Hernández Bento, hermana del principal adversario de Antona, Enrique Hernández Bento, en el Congreso que eligió al sustituto de Soria. 

Además, entre esos diputados figura uno de los hombres llamados a cobrar mayor protagonismo en el PP canario en esta etapa que se abre con Casado de presidente: Guillermo Mariscal. Diputado de perfil bajo, todo un desconocido para la opinión pública, Mariscal ha empezado a prodigarse más en los medios, y antes de que se diera el pistoletazo de salida a este proceso electoral interno, llegó de Madrid a una reunión de la directiva popular canaria con la propuesta de apoyar a Casado. La respuesta de Antona fue defender la neutralidad, que el mismo Antona rompió en parte con su posicionamiento a favor de Santamaría en su visita a Canarias. 

Se da por hecho que Mariscal será el número uno de la lista del PP al Congreso de los Diputados por la provincia de Las Palmas, aunque quede todavía mucha tela que cortar hasta las elecciones generales. Y del mismo modo ya es incuestionable dentro del partido que los manejos de José Manuel Soria para controlar desde la sombra se intensificarán durante los próximos meses cara a esa cita electoral.

Es más, nadie podrá saber a ciencia cierta cuántos compromisarios de Canarias votaron este sábado por Casado o por Santamaría, pero el pulsómetro particular de Soria a la hora de implicarse personalmente para pedir el voto por Casado a casi todos esos compromisarios ya ha dejado sobre la mesa una conclusión para él y los suyos: no controla el partido en Fuerteventura, y ya ha traslado a su entorno que habrá que hacer majo y limpio en esa isla para meter al partido en vereda. 

Se abre, por tanto, un inquietante periodo de posicionamientos en el PP canario, con el trasfondo del triunfo de Pablo Casado y el apoyo de José Manuel Soria a quien ya es presidente del PP y candidato a la Presidencia del Gobierno de España.

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