El mundo bajo el mar

Desafio Fotosub. (Francisco José Van Baumberghen)

Romina Cabeza Izquierdo

San Sebastián de La Gomera —

Hay una actividad que tiene muchos seguidores, tanto como afición, como por profesión y que se puede practicar en cualquier parte, aunque existen determinados espacios que por su biodiversidad y todo lo que ofrece se prestan mejor para ello. Esa actividad es el buceo. No solo se trata de aprender a respirar bajo el agua, sino de descubrir multitud de rincones mágicos a través de aguas cristalinas. Una práctica que ha ido adquiriendo con el paso del tiempo una mayor importancia, hasta convertirse en un divertido deporte que se puede realizar solo o bien acompañado. Realizar una inmersión supone vivir una experiencia única, ver especies desconocidas hasta el momento y descubrir el mundo que se esconde bajo las profundidades marinas.

Buceo y beneficios

El buceo no solo resulta ser una actividad divertida, sino que presenta innumerables beneficios para la salud, tanto a nivel físico como mental. Una de las claves de este deporte es que ayuda a controlar mejor la respiración, al tener que controlar el oxígeno. Del mismo modo, cuando se hace ejercicio dentro del agua, los músculos trabajan mucho más que de costumbre y ello lleva a un mayor fortalecimiento de los mismos.

Cada día son más personas las que deciden adentrarse en esta aventura, entre otras cosas para desconectar de la rutina y realizar algo diferente. Observar paisajes poco comunes y realmente llamativos puede ser muy relajante, por lo que el buceo también fomenta la desconexión del estrés y del agobio. Por tanto, es uno de los deportes más completos que existen, debido a que promueve la interacción del ser humano con el medio natural. Además, fomenta el trabajo en equipo, el compañerismo y las relaciones interpersonales al realizar la actividad de forma conjunta. Sin embargo, lo que quizás más valoran muchos aficionados es la cantidad de satisfacciones personales que crea mencionada práctica.

Así es que, el fondo del mar resulta muy atractivo por todo lo que ofrece y tan sólo requiere llevar a cabo una buena respiración, hacer frente a la resistencia del agua y saber moverse correctamente con todo el equipo.

Los mejores lugares

Rayas, mantas, corales e incluso delfines o tiburones. Son algunos de los grandes tesoros que nos podemos encontrar bajo las profundidades y, en ocasiones, en lugares que también son destinos de sol y playa. Por esta razón son cada vez más los que aprovechan ambas cosas para disfrutar de sus vacaciones. Existen infinidad de lugares muy conocidos para el buceo, entre ellos las Islas Maldivas, pues sus aguas cristalinas ofrecen una buena visibilidad durante todo el año y sus más de 3000 arrecifes pueden hacer que la inmersión se convierta en una de esas experiencias que no se olvidan jamás. Aunque para contemplar delfines, ballenas piloto, morenas o estrellas de mar no hace falta ir tan lejos, ya que las Islas Ciés invitan a todo ello en un mismo espacio, la entrada de la ría de Vigo. Otro lugar que sin duda posibilita esta actividad son las Islas Canarias, al contar con unas condiciones apropiadas para el buceo y unas aguas que rondan entre los 15º y 25º C, una buena visibilidad, gran variedad de biodiversidad y una mezcla de especies tropicales y atlánticas.

Uno de los aspectos más llamativos de los fondos canarios y que hacen que la inmersión sea única son las formaciones rocosas que se han formado como consecuencia del carácter volcánico. En mencionadas profundidades se pueden observar inmensas estructuras de lava negra en la que se esconden gran cantidad de especies como los peces trompeta, sargos o pulpos.

Las Calmas y el buceo

Si existe una isla con ricos fondos y de los más diversos esa es El Hierro. La Reserva Marina de La Restinga es un punto de encuentro para bancos de peces que acuden a la zona por sus ricas aguas. Tortugas, atunes o meros son solo algunas de las especies que se pasan por este lugar a lo largo del año. Más conocido como El Mar de las Calmas, cuyo nombre viene marcado por la ausencia de corrientes y de vientos, presenta en sus aguas temperaturas cálidas, así como una amplia flora y fauna. Todo ello convierte este lugar en un escenario perfecto para la práctica del buceo.

Gran parte de los puntos en los que se puede hacer buceo en la Restinga están dentro de la Reserva del Mar de las Calmas. Dichos fondos representan los primeros puestos en cuanto a mejores lugares para realizar inmersiones, todo ello gracias a sus aguas transparentes, sin contaminación y con una amplia variedad de especies, tanto migratorias como residentes.

En este Mar se puede localizar El Bajón, un lugar muy común al que acuden los submarinistas para observar una roca que supone un punto de encuentro para distintos tipos de peces. Otros espacios a visitar que no pueden faltar, a la hora de realizar una inmersión, es el conocido como La Herradura, que ofrece muy buenas condiciones para aquellos que están comenzando a sumergirse o bien la Punta de las Cañas donde es muy frecuente encontrarse con mantas.

Fotografía submarina

El Hierro lleva celebrando desde hace ya veinte años el Open Fotosub. Un certamen en el que los apasionados de la fotografía submarina tratan de buscar las mejores instantáneas a partir de las especies y los paisajes más singulares. La riqueza natural del lugar ha permitido que durante tantos años la isla sea un verdadero referente a nivel nacional e internacional en el submarinismo. Naturaleza, deporte y diversión tienen cabida en el Open, todo ello unido siempre a otras actividades culturales, medioambientales y científicas que se suman a mencionada celebración.

A pesar de aún ser un campo poco amplio, lo cierto es que la fotografía submarina logra captar cada año a un mayor número de seguidores. Un mundo que se esconde bajo el agua y en el que podemos localizar una infinita vida marina de todos los colores y tamaños.

Desafío Fotosub 2016

Hace apenas unas semanas se ha celebrado el conocido certamen, pues tras premiar a la mejor foto del mes (de forma online) entre enero y agosto de este mismo año, los ocho finalistas y sus respectivas modelos se reunieron en La Restinga para disputar el mencionado desafío, enmarcado dentro de los actos del XX Open Fotosub de la Biodiversidad.

Los ocho fotosubs convocados realizaron cuatro inmersiones en cuatro puntos diferentes, El Bajón, Punta Restinga, Punta del Río y Baja Bocarones, en busca de la mejor colección fotográfica. Finalmente, el ganador fue el palmero Francisco José Van Baumberghen y su modelo Noelia Suárez. Para Baumberghen “es una gran satisfacción el haber obtenido este premio y que el trabajo haya sido valorado por ex campeones del Open Fotosub Isla de El Hierro, además de por verdaderos profesionales del mundo de la fotografía, que para mí han supuesto siempre un referente”.

“Desde hace unos años he tratado de mejorar poco a poco la técnica y de aprender tanto de mis fallos como de mis aciertos en este amplio mundo que supone la fotografía submarina. El desafío Open Fotosub ha sido una experiencia única en la que el trabajo conjunto y la coordinación con la modelo han sido parte de la clave para obtener este premio”, destacó el ganador.

En palabras de Van Baumberghen, la intención era mostrar una colección variada a través de fotografías macro, de ambiente geológico, de fauna, buscando en todo momento el equilibrio en la recopilación, “obtener este reconocimiento coincidiendo con el XX aniversario del Open Fotosub Isla de El Hierro es toda una motivación para continuar con lo que tanto me gusta, la fotografía. Por ello, espero que el próximo año se produzca una nueva edición, pues desde mi punto de vista es el certamen con más prestigio de toda Canarias en lo que respecta a la fotografía submarina”, afirmó.

Nuevos sistemas

Hoy en día ya se pueden encontrar todo tipo de elementos que hacen de las inmersiones y del buceo una actividad altamente segura. Un claro ejemplo de ello es el sistema de comunicación entre los buceadores y la embarcación. Una forma de facilitar la comunicación bajo el agua y en tiempo real a través de unas máscaras que cubren la cara y permiten crear un diálogo entre el submarinista y la persona que está en la superficie, de tal modo que le podrá decir está viendo en la profundidades en ese instante o como se encuentra.

No obstante, se suele decir que el mejor sistema es el del compañero, en el que una pareja de buceadores debe permanecer cerca uno del otro. Sin duda, algo fundamental por si surge cualquier problema bajo el agua, ya sea vinculado al oxígeno, o cualquier otro aspecto.

En definitiva, el buceo no sólo es un deporte bastante completo y que siempre aportará nuevos lugares por descubrir, así como conocimientos por adquirir sobre los fondos marinos, sino que quien lo practica experimentará a su vez, multitud de beneficios para su salud.

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