El fuego ha arrasado 38.544 ha este año hasta el 23 de junio, con un 77% de la zona forestal afectada en el noroeste

En estos casi seis meses se produjeron en toda España 6.412 incendios, 2,25 veces más que hace un año.

Del total de fuegos contabilizados, 3.909, es decir el 60,96 por ciento fueron conatos, es decir, que no superaron una hectárea de extensión y el resto, 2.503, fueron incendios. De estos, tres superaron la barrera de las 500 hectáreas afectadas y pasan a la categoría de grandes incendios forestales (GIF), frente a un gran incendio forestal que se contabilizó en el mismo periodo de 2018.

En cuanto al tipo de vegetación, ardieron 4.450 hectáreas de superficie forestal; 26.825 hectáreas de matorral y monte abierto y 7.268 hectáreas de superficie arbolada. En total, las llamas afectaron al 0,139 por ciento del territorio nacional.

Por otro lado, los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación indican que casi la mitad de los incendios (49,83 por ciento) se produjo en el noroeste; seguido del 36,76 por ciento, que se registraron en las comunidades interiores; el 12,96 por ciento en el Mediterráneo y el 0,45 por ciento en Canarias.

Asimismo, el 74,15 por ciento de la superficie arbolada ardió en el noroeste; el 13,03 por ciento en las comunidades interiores; el 12,65 por ciento en el Mediterráneo y el 0,18 por ciento, en Canarias.

Finalmente, del total de la superficie forestal afectada, casi el 80 por ciento (77,29%9 se quemó en el noroeste; el 16,98 por ciento en las comunidades interiores; el 5,53 pro ciento en el Mediterráneo y el 0,20 por ciento, en Canarias.

Estas cifras sobre superficie quemada --que además es un 24,17% superior a la media del decenio-- no incluyen sin embargo las afectadas en los incendios acaecidos durante la primera ola de calor del año, que en la Ribera del Ebro ha calcinado más de 6.000 ha en Tarragona, el de Almorox (Toledo) que afecta también a la Comunidad de Madrid, con más de 3.300 ha y en Pedro Bernando (Ávila), más de 1.300.