Catalunya supera los 400 ingresados por COVID-19, un 20% más que hace dos semanas

Todos los indicadores epidémicos demuestran que Catalunya y casi todas las comunidades autónomas españolas están inmersas en una sexta ola de COVID-19 todavía de consecuencias inciertas. Los casos van en claro aumento desde hace aproximadamente un mes y esto se empieza a notar en las camas de los hospitales catalanes, donde ya hay más de 400 ingresados debido a esta patología. 

La vacunación, que en Catalunya protege al 83,7% de la población diana –los mayores de 12 años–, amortigua la gravedad de los síntomas de la COVID-19, según todos los expertos, pero aún así ha comenzado el goteo de hospitalizaciones. Hace dos semanas, a finales de octubre, había 331 ingresados por coronavirus. Esto significa que el aumento en este período de tiempo ha sido del 20%. 

Falta por comprobar cómo afectará esta evolución a las UCI, que suele ser un indicador que se altera justo después de las hospitalizaciones. Actualmente hay 91 pacientes críticos, dos menos que hace 24 horas, y la cifra sigue por ahora lejos del umbral de saturación. Según el Departamento de Salud, es a partir de 400 encamados en la UCI cuando se empiezan a desprogramar operaciones en algunos centros. 

En cuanto a los casos, la curva sigue al alza, con especial incidencia esta vez en los menores de 12 años (los no vacunados). En la última semana se han registrado 5.081 casos de COVID-19, más del doble que hace quince días (2.339). Esto supone que la incidencia acumulada de casos en Catalunya es de 104,20 en los últimos 14 días. Tras rebasar el umbral de 100, esto supondría que la comunidad ha entrado en riesgo medio de circulación del virus, según el nuevo semáforo elaborado por Sanidad. 

Ante el avance de la epidemia, de entrada la Generalitat optó por renovar para las próximas semanas el actual nivel de restricciones, pero lo que deberá decidir en un futuro cercano es si las endurece. El conseller de Salud, Josep Maria Argimon, ha reiterado en varias ocasiones que optarán no por limitar aforos ni actividades sociales, sino por estudiar si se amplía el pasaporte COVID-19. Actualmente este se exige solo para acceder a discotecas. En este sentido, Salud está pendiente de un informe de su comité asesor para la pandemia para decidir si debe o no ampliarlo.