Los trabajadores de Panrico, en huelga desde hace casi siete meses, mantienen la huelga indefinida a pesar de que la dirección de la empresa ha anunciado que presenta un Expediente de Regulación de Empleo Temporal de Empleo (ERTE). Esta iniciativa podía permitir a los trabajadores afectados acogerse al subsidio de desempleo y, al mismo tiempo, suponía aceptar que los empleados reanudasen la producción.
La decisión de la empresa se ha visto con desconfianza por los trabajadores, que temen que si aceptan de entrada la propuesta su situación empeore, según han manifestado a este diario. Igualmente, el consejero de Empresa y Ocupación de la Generalitat, Felip Puig , ha mostrado su contrariedad por la decisión unilateral de Panrico. El Gobierno había citado empresa y trabajadores para el viernes en la última reunión de mediación.
Ante la extraña situación que se ha producido, los trabajadores han decidido mantener sin cambios sus movilizaciones. Así, Sabadell será el marco de la próxima manifestación convocada por la asamblea de empleados de la fábrica de Santa Perpètua de Mogoda. En el mismo sentido, el comité de empresa tiene pensado escuchar las propuestas que haga la dirección en la reunión del viernes y luego debatirlas en la asamblea.
La situación es tensa para los trabajadores, que viven con dificultad su huelga después de siete meses de protestas. Pero la empresa también querría encontrar una solución. Actualmente tener parada la fábrica de Santa Perpètua está evitando que el grupo alimentario que preside Carlos Gila inicie su recuperación, según sus propias declaraciones. Además, Cataluña, uno de los mercados más importantes para Panrico, mantiene una baja tónica de ventas porqué que el efecto de la huelga afecta a los consumidores.
A su vez, la Generalitat ha decidido aplicarse a fondo ante lo que cree que es un peligro importante para la continuidad de la industria en Cataluña.
La última sentencia sobre el conflicto, emitida por la Audiencia Nacional, no ha hecho que los trabajadores cedieran en sus posiciones . La resolución jurídica hacía posible que la dirección de Panrico despidiera 124 trabajadores de la planta catalana, que se sumarían a los 30 que ya se hicieron efectivos durante el año 2013.