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La indignación de los afectados por el trasvase Tajo-Segura llega al Congreso

Estado del embalse de Buendía / Foto: Plataforma contra el Tajo-Segura

Diego Jimeno Manrique

“Todo el desarrollo que durante 37 años debíamos haber tenido aquí en la zona, se ha ido por los tubos hacia Levante”,  reclama José Antonio Vargas, portavoz de la Plataforma Ciudadana de Perjudicados por el trasvase Tajo-Segura. La Fundación nueva Cultura del Agua y la Plataforma Tajo-Aranjuez, también estarán representados en el Congreso de los Diputados, cuando esta tarde se reúnan con el grupo popular de Medio Ambiente para trasladar sus quejas.

El tema del trasvase Tajo-Segura abre un nuevo capítulo, esta vez decisivo para la solución del problema del agua, que a los pueblos ribereños les está afectando cada vez más por la falta de agua en el curso del río.  José Antonio Vargas explica que lo que quieren los afectados es que “el río, por su parte media, vuelva a ser río, que no lo es” e incide en que en estos momentos “no tiene reservas ni tiene nada”.

Las plataformas se reunirán con los portavoces parlamentarios del grupo popular de Medio Ambiente María Teresa de Lara Carbo y Joaquín Rodríguez, este lunes a las 17.00. Aunque dicen no ser ellos los que deban encontrar las soluciones, Vargas explica que son conscientes que  “tienen desaladoras hechas sin utilizar y un montón de acuíferos subterráneos que tampoco están explotando” y sentencia diciendo que “el río Tajo ahora mismo está muerto, no da más de sí”.

Mientras que la Fundación nueva Cultura del Agua y la Plataforma Tajo-Aranjuez se formaron hace años, la Plataforma Ciudadana de Perjudicados por el trasvase Tajo-Segura, apenas llega a los tres meses de vida. Aun así, sus iniciativas son variadas, como la campaña de recogida de firmas en change.org o diferentes actos de protesta que han promovido para la defensa del río Tajo.

José Antonio Vargas cuenta que la situación del río “está afectando en todo” y recuerda que “cuando se hizo el embalse en su época, quitaron todas las tierras de labor, que eran las mejores tierras que había en la zona. Cuando se construyó el embalse se prometió una serie de infraestructuras que no se hicieron ni se han hecho y también nos dijeron que íbamos a vivir del turismo. Así fue hasta que se puso en marcha el trasvase Tajo-Segura. A partir de ahí fue la muerte paulatina”.

El portavoz de la Plataforma Ciudadana de Perjudicados por el Trasvase Tajo-Segura concluye argumentando una de las reivindicaciones que plantearán en el Congreso refiriéndose a la cuenca hidrográfica del Segura y destacando que “hay estudios que demuestran que hay agua ahí para abastecer de sobra”.

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