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Coches, terrazas y pavimento, principales problemas a resolver con la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento de Valencia

Plano con las nuevas zonas peatonales, en naranja.

Carlos Navarro Castelló

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El exceso de coches, la dificultad de transitar por las aceras debido a la invasión de terrazas y el resbaladizo pavimento, especialmente en días de lluvia, son los principales problemas de la actual plaza del Ayuntamiento.

Así se desprende del proceso participativo 'Pensem la Plaça de l'Ajuntament', cuyas conclusaiones ha presentado este miércoles la concejala de Participación Ciudadana, Elisa Valía, tras finalizar la fase de diagnóstico en la que más de 1.200 personas y 30 entidades han opinado sobre su reurbanización y peatonalización.

En este proceso se han establecido un total de 27 criterios, de los que los valencianos y las valencianas tendrán que priorizar la importancia de cada uno de ellos hasta el 22 de diciembre.

Valía ha valorado muy positivamente los resultados de la fase de diagnóstico por “la aceptación absolutamente mayoritaria de peatonalizar la plaza del Ayuntamiento, así como de la necesidad de hacer un proceso participativo para definir los futuros usos”.

“Tengo que resaltar la actitud totalmente propositiva de los ciudadanos que han participado y destacar que el 70% pertenecen a otros barrios de la ciudad, por lo que hemos conseguido nuestro objetivo de abrir este proceso a la ciudad y plantearlo como un proyecto de ciudad y no solo de barrio”, ha agregado.

La corporación municipal ha recogido las ideas de la mayor diversidad de agentes, así como también las propuestas de mejora, para generar un diagnóstico de la situación de la emblemática plaza del Ayuntamiento de València y su futura

reforma.

De las 1.200 personas y 30 entidades que han participado, el 70,25% son de la ciudad de València, el 18,25% de fuera de València, y el 11,50% del barrio de Ciutat Vella.

Más zonas verdes y de descanso

El proceso se ha articulado en torno a tres ejes: red, espacio, y actividad. En el primero, se incluye la conectividad y modos de movilidad; accesibilidad; y seguridad. En el segundo, el bienestar; el verde urbano y agua; los servicios urbanos; patrimonio y paisaje; y mobiliario urbano.

Y en el tercero y último, y no por ello menos importante, personas usuarias; equipamiento; actividades económicas sociales y culturales; y gestión y participación.

Como resultado, se han estipulado un total de 27 criterios, entre los que destacan crear múltiples zonas para sentarse; aumentar el verde de la plaza con arbustos, árboles de hoja caduca y más permeabilidad del suelo; no ampliar el número de terrazas; mejorar la temperatura en las zonas de estancia con más sombras en verano y más sol en invierno, y aumentar la presencia del agua en la plaza; mejorar el acceso de las bicicletas a la plaza y aumentar la frecuencia del transporte público; asegurar el acceso al vehículo privado a residentes, personas con movilidad reducida y párquines públicos; introducir equipamiento lúdico para atraer a los y las infantes; diseñar una infraestructura flexible para la programación de actividades culturales; y equipar el espacio con baños públicos y fuentes para beber, entre otros.

“Estamos satisfechos con la combinación de actores que han participado en cada una de las actividades, porque hemos garantizado que personas con intereses distintos hayan estado sentados en una mesa o participando en un taller, y podemos llegar a unos criterios ciudadanos que se consideren consensuados con los actores más relevantes de la plaza y de la ciudadanía en general”, ha remarcado la concejala Valía.

Una plaza activa y espontánea

Los valencianos y las valencianas, que así lo estimen oportuno, podrán a través de www.valencia.es/pensem-la priorizar la importancia de cada uno de los 27 criterios con sus correspondientes propuestas de mejora.

Para ello, tendrán que completar un cuestionario que se ha habilitado hasta el próximo domingo 22 de diciembre. La conclusión, como ha reconocido la concejala de Participación Ciudadana, se trata de “cinco retos a los que deberán enfrentarse los equipos redactores” y que son “la naturalización de un entorno histórico; una plaza equipada de manera flexible; un espacio accesible a dos velocidades; una oportunidad local y global; y una plaza activa, planeada y espontánea”.

“Cuando termine el plazo del cuestionario online y del taller en el Ateneo Mercantil de esta tarde, se procesará la información y se elaborará un documento de criterios ciudadanos para incorporar al pliego del concurso de ideas. Queremos que a finales de año o a principios de 2020 esté el documento de trabajo para incorporarlo cuanto antes al concurso de ideas”, ha concluido Valía.

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