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El coordinador de IU Asturias impone 'su modelo' de primarias pero no cierra la crisis interna
El coordinador general de IU en Asturias, Manuel Orviz, ha impuesto su mayoría en el Consejo Político (84 votos a favor) para sacar adelante la propuesta de abrir a la militancia el proceso de elección del candidato autonómico. La maniobra del líder de la coalición ha roto la estrategia de las doce organizaciones más críticas con su gestión, que exigían la elaboración de un reglamento y un calendario para la celebración de primarias para no forzar una asamblea extraordinaria para sustituirle al frente de IU.
El documento de la dirección plantea abrir a la militancia la elección del candidato autonómico a través de un proceso de primarias, que decidirá si serán abiertas o cerradas. “Ha imperado el sentido común”, ha dicho el líder de la coalición en un intento por silenciar las voces críticas y cerrar en falso la crisis interna.
El denominado sector crítico, alineado con Noemí Martín, rival de Orviz, optó por no participar en la votación. Los líderes de las organizaciones más combativas hacia el coordinador general, los de Oviedo y de Langreo, han calificado la propuesta de “maniobra, que lo único que pretende es dar pasos atrás en el proceso de apertura y democratización de la organización. Sólo añade burocracia”, dicen.
La propuesta del coordinador general pretende abrir un proceso de primarias con voto fraccionado para elegir al cabeza de lista y elección directa de los militantes de los coordinadores locales y regional.
Los líderes locales acudieron a la reunión con la intención de “romper la baraja de la estabilidad orgánica y exigir una asamblea”, si el día 21 de este mes no hay un reglamento y un calendario para las primarias. De lo contrario, comenzarán a recabar apoyos para celebrar una asamblea extraordinaria, “de donde saldrá una nueva dirección que dirija de verdad”, aseguran.
La última asamblea, de la que salió elegido coordinador general Manuel Orviz, aprobó la elaboración de un reglamento y de un calendario para celebrar unas primarias para la elección del candidato. “Tenía un plazo de un año y ya llevamos dos”, dice Alejandro Suárez, líder de la organización en Oviedo.
Tras dos reuniones de la comisión encargada de elaborar este reglamento, “a la tercera llegó Angelín y mando parar”, recalca el concejal de IU, Emilio Huerta, en alusión al que fue portavoz y diputado autonómico, Ángel González, que abrió una herida profunda en la dirección regional que todavía no está cerrada.
Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Asturias condenó a Ángel González a siete años de inhabilitación por prevaricación administrativa al fraccionar unos contratos, en su etapa de viceconsejero en el Gobierno del Principado, para la señalización de unos monolitos en las fosas de las víctimas del franquismo en la Guerra Civil. La decisión del entonces diputado de no dimitir ni abandonar su escaño provocó una tensión interna en las filas de IU.
Ante la presión, la dirección de IU optó por suspenderlo de militancia y retirarle el escaño. No fue bastante. El resultado de las elecciones europeas en Asturias ha influido en esta nueva embestida de los críticos hacia el coordinador general. “Han sido un aldabonazo para todo el mundo, incluido nosotros”, dice el portavoz de IU en el Ayuntamiento de Oviedo, Roberto Sánchez Ramos.
La lectura política es la misma para todos: “Los ciudadanos reclaman una nueva forma de hacer política y rechazan la vieja”. Alejandro Suárez y las doce agrupaciones han exigido que se deje de hacer análisis burocráticos y defensivos del resultado electoral y “se abra la organización a la sociedad, que ha demostrado que quiere participar en política”.
En opinión de Suárez, esta maniobra es “un intento de involución orgánica para colocar a un candidato del aparato, probablemente él (Orviz), de cabeza de lista. Por eso no hay un calendario. Para el coordinador regional es ”un nuevo modelo que da la voz a la militancia“.