La CE precisa política de uso justo para eliminar sobrecostes por itinerancia

La Comisión Europea (CE) dio hoy precisiones sobre la política de “uso justo” que acompañará la abolición de los sobrecostes por utilizar el móvil en otros países de la Unión Europea (“roaming”) desde junio de 2017, para las que ha incorporado propuestas del sector y los consumidores.

“Hemos hablado con consumidores, con las partes implicadas. Hemos discutido las clarificaciones necesarias para proteger a los consumidores. No debe haber un incremento de los precios nacionales ni limitarse el consumo nacional de datos”, indicó en rueda de prensa el vicepresidente de la CE para el Mercado Único Digital, Andrus Ansip.

Según la normativa aprobada por la UE en 2015 para poner fin a los sobrecostes de la itinerancia el 15 de junio de 2017, la Comisión debe adoptar reglas antes del próximo 15 de diciembre sobre el “uso justo” de la normativa, para evitar que se produzcan “abusos”.

Los detalles presentados hoy, tras establecer nuevos contactos con la industria y las asociaciones de consumidores, complementan el primer borrador presentado por la CE en septiembre.

Entre las novedades destaca la rebaja del umbral de pérdidas que un operador podrá aducir ante su regulador nacional para reintroducir “excepcionalmente” sobrecostes de “roaming”, del 5 % propuesto en un principio al 3 %.

La Comisión también dio hoy más precisiones sobre el concepto de la “vinculación estable” de un consumidor con su país de origen, que fijará los casos en los que podrá circular por otros países sin pagar sobrecostes de itinerancia.

Se trata de los trabajadores fronterizos, empleados desplazados, estudiantes o jubilados que mantienen un “vínculo estable” con un país aunque no residan oficialmente en él, que podrán “beneficiarse de ofertas” en el Estado en el que trabajen, estudien o pasen un tiempo sustancial.

La CE tampoco quiere que los consumidores sean sometidos a un control “demasiado intrusivo” por parte de los operadores, que podrán vigilar el tipo de consumo que hacen sus clientes.

Así, habrá un “periodo de observación” de “no menos de cuatro meses” antes de que los operadores de telecomunicaciones puedan identificar un “riesgo de uso abusivo” en itinerancia, comparando la utilización nacional con la exterior.

Además, se fijará un periodo adicional mínimo de “alerta” de catorce días antes de que se puedan imponer sobrecargos a los consumidores, una opción contemplada si se detectan abusos.

La Comisión quiere asimismo que todos los consumidores, tanto los que viajan como los que no, tengan acceso a las ofertas nacionales más competitivas.

Para ello permitirá un “freno excepcional del consumo intensivo de datos en itinerancia”, vinculado al nivel de precio mayorista.

“Tal uso intensivo podría hacer que los paquetes de bajo precio no fueran económicamente atractivos, y provocaría repuntes de precios a nivel nacional o en itinerancia”, indicó la CE.

Los países se pronunciarán el próximo día 12 sobre esta propuesta antes de que la Comisión la pueda adoptar formalmente.

Otra rama de la propuesta de la CE para abolir el “roaming” en la fecha prevista consiste en fijar los precios mayoristas que se cobrarán los operadores de los diferentes países europeos entre sí.

Representantes de los Estados miembros y del Parlamento Europeo empezarán a negociar esos topes la semana que viene.