Luz verde al primer presupuesto alemán con déficit cero desde 1969

El Parlamento alemán dio hoy luz verde de forma definitiva al presupuesto federal para 2015, las primeras cuentas con déficit cero desde 1969 y que representan, según manifestó el ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, un “compromiso de cara al futuro”.

El proyecto fue aprobado con 474 votos a favor por representantes de la gran coalición integrada por conservadores y socialdemócratas, frente a 113 en contra.

Schäuble mostró su satisfacción ante los diputados por la meta alcanzada y consideró una obligación no cargar con nuevas deudas a las futuras generaciones ante el progresivo envejecimiento de la población.

Recordó además que existe margen de maniobra para aprobar proyectos de inversiones adicionales.

El presupuesto federal contempla gastos por valor de 299.100 millones de euros e inversiones por 26.453 millones de euros.

Schäuble avanzó, unas semanas atrás, que las previsiones de recaudación fiscal permiten realizar inversiones adicionales por valor de 10.000 millones de euros entre 2016 y 2019.

La canciller Angela Merkel defendió las cuentas ante el pleno el miércoles y aplaudió públicamente el plan de inversiones anunciado ese mismo día por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.

Ese plan, dirigido a los próximos tres años, contará con 21.000 millones de euros como palanca para movilizar quince veces más, 315.000 millones, a través de un “Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas”, que estará operativo a mediados de 2015 y será gestionado por el Banco Europeo de Inversiones (BEI).

Schäuble subrayó hoy la necesidad de contar con una lista concreta de proyectos a los que se dirigirán esas inversiones, “harto”, dijo, de que en Europa siempre se debata “de cara a la galería” sobre grandes cantidades y que después, cuando se pregunta en qué iniciativas se han traducido, el resultado sea “lamentable”.

Frente a la satisfacción del titular de Finanzas ante el presupuesto por déficit cero, la oposición cuestionó las cuentas aprobadas al considerar que se ha logrado gracias a los bajos intereses actuales, el alto nivel de recaudación y a reembolsos procedentes de la UE.