La Audiencia Nacional obliga a Amazon a registrar dos de sus filiales como operadores postales
La Audiencia Nacional ha concedido parcialmente un recurso con cautelares presentado por Amazon contra una resolución de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que determinaba que la compañía realiza labores de operador postal y que debe cumplir con esta normativa.
No obstante, el fallo sobre las cautelares dictaminado por la Audiencia Nacional determina que dos de sus filiales --Amazon Spain Fulfillment, S.L. y Amazon Road Transport Spain, S.L.-- deben registrarse como operadores postales.
En cualquier caso, se trata de una concesión parcial, ya que los autónomos que distribuyen para estas filiales todavía no tienen que registrarse como operadores hasta que no se resuelva el recurso al completo, según informaron a Europa Press en fuentes del sector.
El recurso que presentó Amazon respondía a la resolución del regulador del pasado mes de septiembre, que establecía un plazo de un mes para presentar la oportuna declaración responsable ante el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para poder operar.
En este sentido, la CNMC ha recordado este lunes que los nuevos operadores interesados en el negocio del envío postal o de paquetería no requieren de una autorización previa, sino tan solo tienen que presentar una declaración responsable ante las autoridades.
Esta única obligación iría acompañada del pago de una tasa postal, estimada entre 200 y 400 euros, un desembolso que no tendrían que hacer si las empresas interesadas ya están inscritas en el registro del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana como empresa que realiza labores de transporte.
La declaración responsable, según explica el regulador, es un documento en el que la empresa de transporte declara su intención de respetar lo que establece la normativa sobre los derechos de los usuarios, así como del ámbito laboral, tributario o de la protección de datos.
De esta forma, como ya resolvió el organismo con anterioridad, las empresas VTC como Uber o Cabify no requieren de una autorización previa para realizar una actividad de transporte que conlleve el traslado de un paquete de un lugar a otro y la entrega del mismo.
De esta forma, este tipo de actividades se circunscriben a la normativa postal, el mismo ámbito en el que la CNMC ha situado los repartos de Amazon, aunque sigue sin aplicarse a la entrega de comida que realizan algunas plataformas como Glovo.
0