Euskadi amplía en 184 camas los hospitales y tiene listas otras 75 ante la ola de contagios de COVID-19 y gripe A

Ante el incremento de las noticias por la gran circulación de virus respiratorios y la intención del Ministerio de Sanidad de pedir a las comunidades autónomas este lunes que hagan obligatoria la mascarilla al menos en centros sanitarios y residencias, Euskadi ha recalcado este viernes que el Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) “está respondiendo” a las necesidades especiales generadas por la COVID-19, la gripe A, la bronquiolitis o incluso la tos ferina. En concreto, asegura que se han dispuesto 184 camas adicionales en los últimos días -120 en Bizkaia, 40 en Álava y 24 en Gipuzkoa- y que podrían abrirse otras 75 -todas en Gipuzkoa-.

“El sistema sanitario vasco está preparado para aguantar incrementos en la presión asistencial superiores a la actual. De hecho, y gracias a la planificación de los planes de contingencia en sus organizaciones sanitarias integradas, Osakidetza está dando respuesta a las necesidades asistenciales de la ciudadanía en todo momento”, asegura la Sanidad vasca, que ya viene recibiendo quejas desde el puente de diciembre por las esperas en servicios como Urgencias y que ha decidido reducir horarios en 104 centros de salud en esta campaña. “Es habitual que, en esta época navideña, las temperaturas más frías junto con un incremento de los encuentros sociales en entornos cerrados incrementen la incidencia de infecciones respiratorias en Euskadi, lo que provoca el aumento de actividad en urgencias y hospitales. La mayoría de los pacientes que está requiriendo de ingreso pertenecen al colectivo de personas mayores con patologías crónicas y vulnerables afectadas por una infección respiratoria”, abunda Osakidetza..

El detalle de las 184 camas adicionales muestran que, en Bizkaia, Basurto “ha añadido 40 a sus 625 de base”, Usansolo “28 a las 411 con las que cuenta normalmente”, Cruces “20 a sus 814 camas”, el Alfredo Espinosa de Urduliz “22 a las 146” y Santa Marina “10 a las 190 plazas ya disponibles”. En el caso alavés en Santiago hay 30 camas más y “se han abierto diez boxes de observación en las Urgencias de Txagorritxu como área de preingreso”. Los centros de Vitoria, agrupados en el hospital universitario de Álava, tienen normalmente 760 camas. En Gipuzkoa, el refuerzo solamente se ha hecho en el Bidasoa. Suma 24 camas a las 86 ordinarias. “No obstante, están preparadas [más camas] para habilitar en caso de que la situación así lo requiriera”, explica Osakidetza. Son 35 en Donostia, 12 en Zumarraga, 8 en Mendaro y 20 en Eibar. “Esta ampliación de la capacidad hospitalaria permitirá mantener la actividad ordinaria de nuestros hospitales y atender el incremento de la demanda provocada por las infecciones respiratorias”, se indica.

En cuanto a la mascarilla, en Euskadi ya se han emitido dos recomendaciones en las dos últimas semanas a la luz de los datos epidemiológicos, que muestran una incidencia estimada de unos 600 casos por cada 100.000 habitantes sumadas las infecciones de gripe (que mayoritariamente es la del tipo A que generó una pandemia en 2009), COVID-19 (con subvariantes de ómicron como dominantes) y otras patologías. El último informe oficial apuntaba a que han subido un 50% los ingresos en solamente una semana.

Esas recomendaciones no se limitaban al uso de protecciones en centros sanitarios o residenciales, sino también fuera de ellos en caso de presentar síntomas. Se aludía a espacios cerrados y también a otras medidas muy conocidas durante la pandemia como el distanciamiento social o la higiene de manos. Eso sí, fuentes del equipo de la consejera Gotzone Sagardui indican que de la recomendación a la obligatoriedad hay un “salto”. Euskadi ya ha recibido el orden del día del Consejo Interterritorial de este lunes y en él no hay una mención expresa a las mascarillas pero sí una genérica a adoptar medidas frente al pico de infecciones respiratorias.