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El juzgado archiva la segunda querella sobre el 'caso Bidegi', que implicaba a cargos guipuzcoanos del PNV en pagos irregulares

La diputada de Infraestructuras Viarias, María Ubarretxena, en las Juntas Generales de Gipuzkoa

Belén Ferreras

Bilbao —

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El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Azpeitia ha acordado el “sobreseimiento provisional” de la querella interpuesta en 2014 por la Diputación de Gipuzkoa, en esos momentos gobernada por Bildu (entonces no era EH Bildu), por la presunta comisión de delitos de malversación de caudales públicos y falsificación de documentos por parte de sus antecesores en la institución foral, del PNV, en las obras de la AP-1 en el tramo Eskoriatza norte-Arrasate norte. Esto implica el cierre de la causa a todos los efectos, aunque técnicamente podría reabrirse si surgieran novedades relevantes.

El juzgado considera que “de las diligencias practicadas no aparece suficientemente justificada la perpetración del delito que ha dado lugar a la formación de la causa” y acuerda su archivo provisional en un auto que no es firme y contra el que cabe recurso. El origen del que se ha dado en denominar 'caso Bidegi' fue la querella interpuesta en 2014 por la Diputación de Gipuzkoa contra el entonces director de contrato de Bidegi, sociedad foral encargada de gestionar y mantener las autopistas en ese territorio, un director de obra y un representante de la UTE Laurena por “supuestas desviaciones injustificadas en las liquidaciones y unos sobreprecios”, que habrían “supuesto perjuicio económico” para la entidad foral, en los abonos por la obra de la AP-1 Vitoria-Gasteiz –Eibar, en el tramo Eskoriatza norte-Arrasate norte.

En el auto se recogen diversos informes periciales y se concluye que “se ha acreditado que en la liquidación final de la obra no ha existido perjuicio económico para la Diputación Foral de Gipuzkoa ni para Bidegi S.A; por lo que no puede hablarse de desviaciones de dinero público mediante sobreprecios que pudieran sostener una acusación de delito de malversación de caudales públicos” como se mantenía en la querella. El pasado agosto este mismo juzgado acordó el sobreseimiento provisional de otra querella de este interpuesta en 2015 por la Diputación de Gipuzkoa por varios delitos, entre ellos el de malversación de caudales públicos, en relación con las obras de AP-1 en el tramo Arlaban- Eskoriatza norte. Este archivo está recurrido en la Audiencia de Gipuzkoa.

A la espera de la resolución de este recurso y del que pueda presentarse contra este segundo sobreseimiento, la diputada de Infraestructuras Viarias de Gipuzkoa, Maria Ubarretxena, ha considerado que tras nueve años de instrucción, “nos acercamos al final de un dilatado proceso en el que se ha perseguido de manera infundada a trabajadores y trabajadoras de la Diputación, de Bidegi y de las empresas adjudicatarias; se ha puesto bajo sospecha a los y las responsables políticos y la integridad de la institución foral”, ha explicado Ubarretxena. Así, “finalmente queda expuesta la estrategia de quienes solamente buscaban menoscabar a toda costa y a cualquier precio al rival político, bajo acusaciones de graves delitos, apoyándose en informes erróneos y generando un daño irreparable a demasiadas personas”. 

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