El PP sitúa a Antón Damborenea como asesor en el Tribunal de Cuentas vasco para ocupar la plaza de Amaya Fernández
El PP ha elegido a un expresidente en Bizkaia, Antón Damborenea, como sustituto en la plaza de asesor en el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas que le ha quedado vacante precisamente porque su anterior inquilina, Amaya Fernández, pasó a ser presidenta de la gestora del partido en Bizkaia. Inicialmente, Fernández quiso compatibilizar ambas funciones, pero un duro informe sobre la necesidad de evitar un conflicto de intereses entre un órgano de control y el día a día de la política terminó con que se decantara por aceptar la propuesta de Génova de asumir el liderazgo de momento transitorio en un territorio en que se interpretaba que el ciclo de Raquel González estaba agotado.
Según ha informado 'El Mundo' y han confirmado fuentes internas, Damborenea ocupará el puesto de asesor o “auditor-jefe” en la jerga interna de la consejera Teresa Crespo. El tribunal tiene siete vocalías y, en 2021, al PP le correspondía una en el reparto político por el que el PNV tiene tres, el PSE-EE dos y EH Bildu la séptima. Los partidos, además, pueden designar al menos un asesor por cada uno de sus consejeros. Se pueden consultar aquí quiénes son.
Damborenea, de 65 años, fue parlamentario del PP desde 1994 hasta 2020, donde ejerció diversas funciones, aunque principalmente la portavocía económica. En paralelo, desde 2008 hasta la llegada de González, en 2017, fue también el presidente del partido en Bizkaia. En los últimos años, el PP lo había mantenido como asesor en el Parlamento y como vocal en la Junta Electoral, otro órgano de control donde los partidos hacen propuestas.
En paralelo, según explicó el presidente del PP vasco Javier de Andrés, Fernández parece mantener abierta la vía del recurso sobre su situación. Ella intentó mantenerse en el Tribunal de Cuentas ya que, por ejemplo, otra asesora, Amaia Ruiz de Viñaspre, pudo compaginar durante años esa posición y la de 'número dos' del PNV de Álava. La propia Fernández había sido autorizada en estos años a tener un papel en otros roles del PP, como el comité electoral o el congreso nacional. Ahora, los letrados del Parlamento Vasco, órgano del que depende el tribunal, entendieron que podía acceder a información confidencial y usarla en beneficio de su partido y contra sus rivales.
En paralelo, en los últimos días han emergido movimientos que cuestionan la operación de Génova en Bizkaia. El partido ha apartado a la anterior presidenta y a su equipo sin un congreso. En paralelo, según publicó 'El Correo', hay cargos que cuestionan que Fernández pueda ejercer el liderazgo de modo indefinido y abogan por un cónclave. La operación ha incluido desginar como secretario general y 'número dos' en Bizkaia a un joven con mucha proyección interna, Santiago López Céspedes, que ahora es parlamentario vasco.
Fernández llegó a ser presidenta interina también en Euskadi. Era la secretaria general de Alfonso Alonso y cuando Génova lo apartó 'de facto' antes de las autonómicas de 2020 e impuso la vía de rescatar a Carlos Iturgaiz, a ella le correspondió temporalmente la dirección del partido. Ya en otoño de 2020 Iturgaiz retomó las labores orgánicas y fue quedando relegada hasta que logró acomodo en el Tribunal de Cuentas.
1