Extremadura se abstuvo en la votación de topes de déficit y deuda por el reparto desigual Estado-comunidades
El Consejo de Política Fiscal y Financiera ha aprobado este jueves pasado los objetivos de déficit y deuda de cada comunidad para este ejercicio y los próximos tres años, de modo que todas se adaptarán al 0,7 por ciento del PIB en 2016, al 0,6 por ciento en 2017, al 0,3 por ciento en 2018 y al 0 en 2019.
La consejera de Hacienda y Administración Pública, Pilar Blanco-Morales, ha informado que Extremadura se ha abstenido en la votación de los puntos del día referentes al establecimiento del objetivo del déficit y de deuda planteados en el Consejo, por estar en desacuerdo con el reparto vertical del objetivo de déficit entre el Estado y las Comunidades Autónomas.
El reparto entre comunidades debe hacerse con criterios racionales y de objetividad, al tiempo que ha insistido en la necesidad de fijar objetivos diferenciados acorde a las necesidades de cada una.
Por otra parte, el Consejo de Política Fiscal y Financiera ha establecido el techo de deuda, que ha quedado limitado en el 20,6 por ciento del PIB para Extremadura en 2016.
La previsión de deuda financiera para la región al cierre de 2016 se sitúa en este porcentaje, 4.115,15 millones de euros.
El objetivo de deuda pública para el conjunto de las comunidades autónomas en el ejercicio 2016 se marcó, en el pasado CPFyF, en el 24,4 por ciento del PIB para este año, mientras que en 2017 las regiones deberán situarlo en el 24,1 por ciento y bajar al 23,6 por ciento en 2018 y al 22,7 por ciento en 2019.
Por otra parte, Extremadura ha planteado la necesidad de abordar los trabajos de reforma del sistema de financiación autonómica con más tiempo y con un análisis más ponderado y ha resaltado el papel de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIREF) en este contexto.
Dinero de liquidez
Extremadura recibirá 185 millones de euros del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) como adelantó el jueves el presidente de la Junta Fernández Vara.
De estos, 105,4 corresponden a las cantidades pendientes de financiar correspondientes a desviaciones en el objetivo de estabilidad del ejercicio 2015, y 72,4 millones son en conceptos de ampliación del objetivo de estabilidad del ejercicio 2016 del 0,3 por ciento al 0,7 por ciento.
La consejera de Hacienda advierte que “no es un regalo” que se hace a las comunidades autónomas, sino que facilita “al menos” cumplir con los proveedores.
Pilar Blanco-Morales también se ha referido tras la reunión del Consejo a las entregas a cuenta y ha considerado que el Gobierno tiene elementos más que suficientes para poder, con la previsión de los objetivos de déficit aprobados por Congreso y Senado, “hacerlo ya y hacerlo cuanto antes”.