La Asamblea promoverá una ley integral contra la explotación sexual

La Asamblea de Extremadura se ha comprometido este jueves a promover la aprobación de una ley integral contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual. Con motivo de la conmemoración, cada 23 de septiembre, del Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Mujeres, Niñas y Niños, la Cámara ha aprobado, en sesión plenaria, una declaración institucional en la que también apuesta por una estructura de apoyo multidisciplinar a las víctimas.

En ella aboga por generar conciencia social contraria a la compra y consumo de prostitución y a la imagen vejatoria de las mujeres, tras advertir de que la trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual es “uno de los más terribles negocios del mundo, si no el mayor”.

Apunta que según datos de Naciones Unidas y de la Unión Europea, las mujeres y las niñas representan el 71 % de las víctimas de trata detectadas en todo el mundo y el 80 % de las identificadas en Europa occidental, y el 95 % de ellas acaban explotadas para la prostitución.

La Asamblea de Extremadura comparte además el llamamiento de Naciones Unidas para que la respuesta a la Covid-19 y la recuperación posterior a nivel mundial asignen un “lugar prioritario” a la dignidad y los derechos humanos, redoblando los esfuerzos para para proteger a las víctimas de la trata y evitar que las personas vulnerables sean explotadas.

Reconoce también el trabajo de organizaciones y colectivos que siguen prestando servicios vitales durante la crisis, localizando a las víctimas y ayudándolas a tener acceso a la justicia, la salud y la asistencia y protección sociales, “y evitando que se produzcan más actos de abuso y explotación”.

“La igualdad entre mujeres y hombres continuará siendo inalcanzable mientras se compren, vendan y exploten a mujeres, niñas y niños, prostituyéndolos”, asevera la declaración institucional. En esta línea, apuesta por terminar con las redes y mafias que se lucran explotando a las mujeres y menores y por cooperar con los países de origen para acabar con la que constituye “una de las peores formas de violencia contras las mujeres, cuyo sufrimiento se ha agravado debido a la pandemia”.