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Desde que empezó la vacunación se han evitado casi 300 muertes en Extremadura

Vicente Mirón, el primer vacunado de la región, el 27 de diciembre del pasado año

JLA

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Menos pacientes con covid, con grado más leve, y más jóvenes. Resultado, menos hospitalizaciones, ingresos en UCI y fallecidos. Desde que hace cuatro meses y medio, un 27 de diciembre, empezó la vacunación contra esa enfermedad, en Extremadura se han evitado 294 muertes, un 30%, y ese porcentaje va en aumento con el incremento de la imnunización.

Aquel domingo 27 de diciembre empezaba en toda España la vacunación con los primeros fármacos disponibles, el preparado de Pfizer-Biontech. En Extremadura 100 internos en dos residencias de mayores de Mérida, una pública y otra privada, recibían las primeras dosis, un varón de 72 años y una mujer de 85 fueron los primeros.

Terminaba cuatro días después un año, el primero de la covid, con cerca de 40.000 extremeños que la habían pasado, 39.305, de los cuales 1.079 habían fallecido.

Un 1 de marzo se habían notificado públicamente los primeros cuatro casos de enfermedad, de jóvenes procedentes de Erasmus en Italia pero el virus se propagaba con rapidez por España.

Y diez días después, el 11 se conocía el primer fallecimiento, el de una mujer de 59 años de Arroyo de la Luz que había participado en una excursión a Sevilla.

Esa jornada, un miércoles, el presidente de la Junta Fernández Vara se reunía con un consejo regional de crisis, con todo el Gobierno autonómico en pleno más la delegada del Gobierno, los presidentes de las diputaciones provinciales (la fallecida Rosario Cordero asistió por Cáceres) y la federación de municipios.

Después Vara comparecía ante los periodistas y expresaba su preocupación.

Tres días más tarde, el sábado 14, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez anunciaba el estado de alarma.

Una muerte por cada 36,4 casos

Desde aquel 11 de marzo, con la primera defunción, hasta final de año (nueve meses y medio), fueron anotándose una tras otra en los registros oficiales un total de 1.079 para una suma de 39.305 personas enfermas por el coronavirus, es decir, murió una de cada 36,4 contagiadas ý con desarrollo de síntomas.

La letalidad fue por tanto del 2,74%.

Tras la vacunación iniciada a partir del 27 de diciembre, primeramente a cuentagotas por la escasez de dosis que llegaban, y más rápidamente a partir del pasado mes de abril, se han producido otros 35.565 contagios con covid activo en el período que va hasta este pasado viernes, cuatro meses y medio.

El total alcanzaba el viernes 74.810 y al término del fin de semana se ha aproximado a la redonda cifra de 75.000.

En estos cuatro meses y medio los fallecidos han sido 682 (el total acumulado es 1.761), que en relación a los 35.565 casos de este año supone uno por cada 52,14 casos; son muchos no obstante esas 682 defunciones, pues la tercera ola en enero y febrero fue muy intensa.

La letalidad en lo que va de año es ya menor, un 1,92%.

La tasa letal registrada a lo largo de 2020 habría llevado a 976 defunciones, que habrían sido 294 más de las efectivamente sufridas en estos últimos meses; la reducción, gracias a las vacunas, ha sido hasta el momento por tanto del 30%, y tiende a aumentar con el incremento de las inyecciones y la inmunización que se va consiguiendo.

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