Monago cree que alguien revela sus movimientos, horarios de salida y entrada de casa
El presidente de la Junta de Extremadura ha presentado una denuncia en el Juzgado en la que plantea que alguien de la Policía filtra sus horarios de entrada y salida a su domicilio, según ha dado a conocer el diario Público. A causa de esas presuntas filtraciones, las dos mujeres acampadas frente a la urbanización donde él vive, Isabel Rodríguez e Isabel Pintado, conocen y siguen sus movimientos, tanto en Badajoz como fuera de él, añade en su queja.
José Antonio Monago ha pedido a la Guardia Civil, a través del Juzgado, que investigue quiénes de ese dispositivo policial que vigila su casa estaría filtrando informaciones que le ponen en una situación difícil, ya que estas dos mujeres no solo intentan acercarse a él cuando sale y entra de la urbanización donde vive, sino que también se desplazan a actos públicos en los que él participa fuera de la ciudad.
Desde que presentó la denuncia la semana pasada, los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que custodian la urbanización han sido sustituidos por otros.
Isabel Rodríguez, una mujer de 32 años, desahuciada tres veces, y que cumple 72 días acampada en la zona reclamando una vivienda para ella y sus dos hijos, en una protesta que sigue compartiendo con otra mujer, Isabel Pintado de 48 años, desmiente que reciban cualquier tipo de información secreta sobre los movimientos del presidente.
“Nadie de la Policía nos dice nada, no es verdad”. A ellas no se las deja acampar –lo hacen en un coche Seat Ibiza de segunda mano, donde pasan la noche- a menos de 500 metros de la urbanización de Monago, donde hay unas señales que prohíben por “zona de seguridad” estacionar y aparcar a menos de esa distancia, pero desde su posición “sabemos perfectamente cuándo va a salir y entrar el presidente porque vemos los movimientos de los coches oficiales”.
Antes de salir de su domicilio, explica Isabel Rodríguez, llegan su chófer con el coche oficial, más el vehículo policial de escolta, para recoger al presidente, y cuando regresa por la noche “también vemos llegar los coches y los conocemos perfectamente”. En ese caso se acercan a pie a la entrada de la urbanización pero la Policía les impide aproximarse demasiado, bajo amenaza de denuncia.
En cuanto a los actos oficiles del presidente, “su agenda es pública”.
“Yo creo que este señor ha perdido los papeles”, añade en referencia a la denuncia presentada por Monago en el Juzgado, “se le ha ido esta situación de las manos y ya no sabe dónde está”.
Son ellas las que se quejan del trato policial ya que de hecho, aunque creen que no de derecho, es como si pesara sobre ellas una orden de alejamiento del presidente de la Junta, y cuando han querido encontrarse con él en un acto público, en Montijo, Olivenza o recientemente en Campomayor, se las ha mantenido a bastante distancia.
En Campomayor el lunes pasado superaron primero un control policial de carretera, pero ya en el segundo les pararon y no las dejaron seguir. “Un policía tenía todos nuestros datos, modelo del coche, color y matrícula, y que teníamos prohibido el paso”.
A mediados de este mes tuvieron en su lugar de acampada un cruce de palabras con el presidente de la Junta, presenciado por la Policía, en un momento en que según Isabel Rodríguez el presidente paseaba con su perro y sus hijos.
“Insidias” de Monago
Ricardo Cabezas, candidato por el PSOE a la Alcaldía de Badajoz, tacha de “insidias” las insinuaciones que el presidente ha hecho sobre la Policía, y pide al delegado del Gobierno, Germán López, que se ponga al lado de los agentes cuestionados, frente al “vapuleo” político.
Cabezas recuerda que fue el presidente Monago quien decidió cerrar la casa presidencial de Mérida e irse a vivir a Badajoz, aduciendo entre otros motivos de ahorro, “una mentira” según el socialista cuya única consecuencia es que haya habido que dedicar a su servicio a policías que antes realizaban labores de seguridad ciudadana en Badajoz.