Alfonso Rueda asegura que las europeas avalan a Feijóo y garantizan su silla al frente del PP

Alfonso Rueda, el sucesor de Alberto Núñez Feijóo en Galicia, defiende públicamente que el presidente del PP español está respaldado por los resultados de las elecciones europeas y que debe mantener su silla sin cuestionamientos: la progresión en las urnas “avala” el trabajo hecho hasta ahora y “el que le queda por hacer” hacia el objetivo de llegar al gobierno.

Rueda, presidente de la Xunta y del PP en Galicia, ha calificado los resultados de “magníficos” y los ve como una confirmación de que su partido va “al alza” desde que está Feijóo al frente. Ha insistido en darles una interpretación plebiscitaria a las elecciones europeas: “Es un rechazo al actual Gobierno de España y una victoria clara del PP”. Sobre si la diferencia sobre el PSOE tendría que haber sido mayor -ha sido de cuatro puntos porcentuales-, se ha remitido a unas declaraciones previas en las que había dado como referencia precisamente ese margen como algo “importante y meritorio”.

Este, añadió, es “un buen punto de partida” para que el partido encare la convención ideológica que tiene pendiente y en la que uno de los aspectos a abordar es la relación con las formaciones de extrema derecha. El PP y Vox gobiernan juntos y tienen pactos en varias comunidades autónomas.

En estos resultados la lectura gallega de Rueda es que el territorio de origen de Feijóo es uno de los puntales. Es la tercera autonomía con un mayor porcentaje de apoyo al PP, dijo. Y, además, tanto Vox como la candidatura encabezada por el agitador ultra Alvise Pérez han logrado un respaldo “testimonial”. Ocurrió ya en las municipales del año pasado -Vox tiene una única concejala, en el ayuntamiento ourensano de Avión- y en las autonómicas del pasado mes de febrero -Vox sigue fuera del Parlamento de Galicia-.

La explicación de Rueda para estos escasos apoyos a la ultra derecha está en el trabajo hecho por el PP, que sigue concentrando el voto de derechas, y en el “sentidiño” que atribuye a los votantes gallegos. “Vox es testimonial y lo celebro”, aseguró. Inmediatamente después pasó a la defensa de los pactos de su partido con la formación que dirige Santiago Abascal, tanto de los vigentes como de uno hipotético para llegar a la Moncloa.

Los acuerdos de PP y Vox en varias comunidades autónomas favorecen, según el presidente gallego, “la gobernabilidad” y sus compañeros “tienen todo el derecho del mundo” a gobernar con la ultraderecha, en especial porque “la izquierda no duda en pactar con cualquiera para impedir que gobierne el PP”. La situación “ideal” para él sería que su partido crezca en las urnas: “Que tengamos cada vez más apoyo para hacer gobiernos, no sé si en solitario”. Entretanto, el entendimiento con la ultraderecha es “totalmente entendible”.