ENTREVISTA | Carlos Callón: “Los llamados emergentes tienen 'El Hormiguero' y NÓS, hormiguitas activistas y trabajadoras”
Carlos Callón (Ribeira, 1978) acumula muchas horas de vuelo en el activismo social y se convirtió en uno de los rostros más reconocibles de Galicia durante sus años en la presidencia de A Mesa pola Normalización Lingüística, entidad de referencia en la defensa del idioma gallego. Inmerso en una “dura” campaña, apela a ese bagaje de lucha social y política para pedir el apoyo como candidato por A Coruña de NÓS-Candidatura Galega, la plataforma electoral en la que se integra el BNG, y así garantizar lo que ve como “fundamental” para el 20-D: “que Galicia esté presente” [entrevista realizada originalmente en gallego]
¿Cómo está llevando la campaña?
La veo como una continuidad entre mi trabajo como activista no solo de la lengua, también en el ámbito gay-lésbisco o ecologista. Ahora continúo con otra pretensión, la de llevar ese activismo al Congreso. Vengo con energía y fuerza, sabiendo que va a ser un trabajo muy intenso, pero lo asumo con muchas ganas. Lo que a veces como activista ves con impotencia, es más factible en las instituciones. Ahora voy a poder darles voz directamente la esas reclamaciones y voy a ser muy pesadito [ríe] tanto en las cuestiones de izquierdas como en las cuestiones de país.
Habrá quien le pregunte por qué se mete en esto. Son unas elecciones complejas, sin unas siglas consolidadas como las del BNG...
Los compañeros y compañeras de trabajo, por ejemplo, me han preguntado exactamente esto. Y yo he contestado con ejemplos concreto de nuestro alumnado: a mí me rompió el corazón ver el caso de un alumno al que deahuciaron. Te sientes, como profesor, impotente, porque no puedes ayudar lo suficiente. Lo mismo con la situación precaria de nuestro centro de enseñanza. Yo no podía quedarme en el sofá tranquilamente. Y también decidí dar el paso porque NÓS convocó unas primarias. Ninguna otra organización convocó unas primarias a las que me pudiera presentar libremente, como cualquier outa persona que lo deseara.
La campaña de NÓS ha dado que hablar por sus formas, por ejemplo con sus vídeos. ¿Por qué han decidido hacer esa apuesta y hacerlo comenzando con un vídeo sobre la diversidad de opciones sexuales?vídeo sobre la diversidad de opciones sexuales
A mí me han llamado la atención dos cosas de esto: no esperaba tanta respuesta a nivel gallego e incluso estatal, lo que demuestra que sigue siendo necesario. Y después, también algunas actitudes, también por parte de gente declarada de izquierda, diciendo que esto es “para llamar la atención”. Eso sí que llama la atención. Es lo mismo que, por ejemplo, cuando un día, hace poco, iba paseando de la mano de mi pareja y un chaval nos ofreció unas hostias porque, al ir cogidos de la mano, le llamábamos la atención. ¿Por qué los vídeos? Queremos trasladar nuestros mensajes de una manera fresca y ágil, y qué forma más clara de trasladar que apostamos por la plena igualdad de derechos que mostrar la normalidad de dos mujeres, un hombre y una mujer y dos hombres dándose un beso.
Y están haciéndolo en una campaña en la que las elecciones también se juegan en las pantallas, y no solo en las de la televisión...
Sí, y ahí hay una parte muy poco democrática, que es un intento de silenciar a una parte de la sociedad gallega tanto cuantitativa como cualitativamente. El nacionalismo gallego, por mucho que incomode, existe, y sería lógico que tenga, con humildad, el espacio que nos corresponde. Tenemos más asientos en el Congreso que las llamadas fuerzas emergentes. Por eso tenemos que intentar saltar esta situación: ellos tienen 'El Hormiguero' y nosotros, las hormiguitas trabajadoras, las activistas que trabajan cada día.
Según las encuestas, su apuesta electoral es arriesgada. Muchas les dejan sin representación...
Lo que sabemos es que las encuestas no han acertado ninguna elección europea en los últimos tiempos, por eso lo importante son las tendencias, que marcan un descontento muy importante contra los gobiernos que padecemos y que la simpatía hacia el nacionalismo gallego aumenta. Cada vez más gente se entera de que, si el nacionalismo gallego no está, los problemas gallegos no están en las instituciones. En el Congreso hay 23 diputados y diputadas por las circunscripciones gallegas, pero solo les llaman “las gallegas” a las diputadas del BNG, de las que NÓS es continuadora. Igualmente, hay muchos eurodiputados que podrían presentar propuestas en la defensa de nuestro país, pero a quien llaman Madamme Galice es a Ana Miranda.
Pero hay quien les puede decir desde el resto de fuerzas: “oigan, nosotros somos tan gallegos como ustedes”.
Hace pocos días, en un debate, representantes de fuerzas estatales decían: “es que Callón se quiere apropiar de Galicia”. Mi respuesta fue: “por favor, aprópiense ustedes un poco de Galicia” presentando iniciativas sobre el país, sobre los marineros del cerco, la pesca del xeito, de los emigrantes retornados, de la lengua... No vale hablar de ciudadanía empoderada, de nucleo irradiador... O, como un candidato del PP [por A Coruña], decir que “la ilusión de los gallegos es viajar a Madrid”.
Se refiere a las cuestiones de la lengua, a las que usted ha estado ligado muchos años. ¿Por qué la ciudadanía debe confiar también en Carlos Callón para defender temas vinculados a la industria, a la sanidad, a las infraestructuras...?
Por una parte, por mi activismo también en otros campos, que es conocido. Y también por mi discurso público: quien me conozca personalmente o por los medios saben que amo el país y mi compromiso de izquierdas. Y voy a ser coherente en esas dos cuestiones.
Con esas dos claves, situémonos en principios de enero. El diputado Callón tiene la oportunidad de votar un cambio en el Gobierno de España: ¿Qué mínimos debe cumplir un presidente o presidenta para contar con su voto?
Nosotros vamos a negociar basándonos en la coherencia: tenemos experiencia de que gobiernos que se declaran de izquierdas cambian su programa cuando llegan al poder. Y algunos que declaran que no son ni de izquierdas ni de derechas, cambian su programa antes: decían OTAN no y ahora, OTAN sí. Nosotros no cambiamos a golpe de sondeo. Por todo esto vamos a negociar en base a medidas de izquierda y de defensa del país, pero teniendo una cosa muy clara: para nosotros es fundamental que el último desahucio sea el de Mariano Rajoy en La Moncloa.
Estas elecciones llegan después de larguísimos procesos buscando la confluencia entre fuerzas de izquierda en Galicia. ¿Cómo ve el panorama dentro de seis meses, cuando se vuelva a hablar de esto o de algo parecido hacia las elecciones gallegas? Entre otras cosas, mucha gente les ha dicho que estaba cansada de las propias negociaciones...
Agua pasa no mueve molinos. Es cierto que se desearía tener un apoyo mayor, pero hay una estrategia de Podemos a nivel de Estado que ha impedido una mayor unidad. Para nosotros lo fundamental es la coherencia de izquierdas, sin cambiar de programa hasta traicionar los derechos de las mayorías sociales, y que Galicia esté representada con voz propia en la agenda estatal.