Feijoo hace coincidir las agendas del PP y de la Xunta en el final de campaña

Una visita a la sede de una asociación que atiende a personas afectadas por la parálisis cerebral. Un encuentro con los directivos de una fábrica de carrocerías de vehículos en la sede de la empresa. Un recorrido por una explotación ganadera y un saludo a sus propietarios. Son actos que, a priori, encajan sin dificultad en el periplo de un candidato en plena campaña. Estos tres eventos estuvieron marcados en la agenda de Alberto Núñez Feijóo en los primeros tres días de la última semana de la carrera electoral del 21-O, pero no en su condición de candidato a la reelección, sino como presidente del Gobierno gallego. Después de que la Xunta Electoral lo apercibiera a él y a otros miembros de su gabinete hasta en una decena de ocasiones por realizar actos “prohibidos” que “infringen” la Ley Electoral, el Ejecutivo convocó estos actos sólo para la prensa gráfica, esto es, fotógrafos y cámaras de televisión -si bien también acudieron algunos redactores-. Además del protagonista, los tres tuvieron otro punto en común: se celebraron en las mismas ciudades en las que, con escasa diferencia horaria, Feijóo había protagonizado actos de la campaña electoral del PP.

Esto sucedió por primera vez el pasado lunes, 22 de octubre. Los populares celebraban a las diez y media de la mañana un encuentro para presentar “contenidos de su programa electoral” en Pontevedra, con Feijóo y Alfonso Rueda como oradores. A las once y cuarto, ya con el traje de presidente, el actual jefe del Gobierno posaba ante los reporteros gráficos “acercándose -segundo indicó la Xunta-” a la sede de la asociación Amencer-Aspace, en la misma ciudad. Un día más tarde, el martes 23, el cabeza de cartel del PP reprodujo el mismo esquema en Ourense: presentación del programa electoral a las diez de la mañana, en este caso con Manuel Baltar, y a las 11:30, tal y como había anunciado la Xunta, “llegó a la fábrica de UNVI”, la dicha empresa de carrocerías, y “mantuvo una reunión con el equipo directivo”. Veinticuatro horas más tarde, este miércoles, el encuentro sobre lo programa electoral fue en Lugo, de nuevo a las diez. A las once, de nuevo como presidente, “realizó un recorrido” por la “explotación ganadera Granxa Quintián”, donde “saludó los propietarios”.

Presumir de “facturas pagadas” en el último Consello antes de las urnas

La frontera entre las agendas institucional y partidaria no sólo se muestra especialmente débil en estas coincidencias espacio-temporales de las visitas, sino que también lo hará el próximo jueves, en la última reunión del Consello da Xunta antes de las elecciones. Mientras crece la polvareda causada por el informe en el que el Consello de Contas advierte de un “desplazamiento” de 400 millones de euros en facturas del ejercicio de 2010 a 2011 -es un proyecto al que le falta recibir las alegaciones del Gobierno- Feijóo aprovechó el acto celebrado en Lugo sobre su programa electoral para avanzar lo que sucederá en esa reunión semanal del Ejecutivo, la última antes de entrar en funciones. Tras ese Consello, avanza, le explicará a la prensa los “datos del pago de facturas” para demostrar que Galicia es la comunidad más solvente de España“ y ”paga lo que debe“. A través de ese informe de la Consellería de Facenda, asegura, ”quedará claro“ que, aunque ”se registran tensiones de tesorería, Galicia paga y tiene las cuentas ordenadas“. Por ejemplo, asegura, ”las farmacias cobran en los cinco primeros días de cada mes“.

No concuerda con esta versión el candidato del PsdeG, Pachi Vázquez, que no sólo da total crédito al informe del Consello de Contas, sino que además, anticipa, en 2011 la desviación “puede superar los 600 millones”. “Se lo dije cien veces en el Parlamento, que no cuadraban las cuentas, pero ahora ya no se lo digo sólo yo”. “El problema -afirma el socialista- no son los datos que salen” en el informe, instruido por el ex consejero de Manuel Fraga José Antonio Orza, “sino el silencio de Feijóo, que no lo desmiente”.