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El coronavirus avanza por las residencias de mayores: 22 ancianos han muerto, cinco más que ayer

457 contagios en las residencias gallegas y 22 usuarios fallecidos

Daniel Salgado

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Los residentes en los centros de mayores constituyen una de las poblaciones más vulnerables a la epidemia de COVID-19. Y en ellos el virus continúa avanzando: según datos de la Consellería de Política Social, cinco ancianos han fallecido en las últimas 24 horas. La cifra total asciende a 22.

Hay además 346 usuarios de residencias infectados, por 315 del informe anterior de la Xunta. También entre los trabajadoras y trabajadores del sector se extiende la enfermedad y son 111 los afectados. De la más de 22.000 personas que viven en Galicia en estas instituciones, sólo 4.000 lo hacen en las de titularidad pública. El resto son privadas.

Es en estas últimas en las que están apareciendo las mayores dificultades. Primero fue la residencia San Carlos de Celanova, que vio como sus residentes y empleados enfermaban ante la desesperación de los familiares de los internos y la inicial pasividad de la Xunta. A partir de los sucesos de Celanova, el Gobierno gallego decidió habilitar dos “residencias integradas”, una en Baños de Molgas (Ourense) y otra en Santiago de Compostela, donde alojar mayores que hubieran dado positivo en coronavirus.

Pero la infección ya había entrado en numerosos centros geriátricos. Ayer la Xunta comunicó que “intervenía” dos de ellos, ambos propiedad del grupo DomusVI, ubicados en Cangas do Morrazo y en Vigo. Ciento cinco y 71 infectados, respectivamente, provocaron la actuación gubernamental. En la de Vigo han muerto además cuatro personas.

El presidente de la Xunta Alberto Núñez Feijóo dedicó buena parte de su comparecencia de este martes a la situación de las residencias de mayores. Lo hizo para asegurar que existe “una supervisión continua” de las mismas, de las públicas y de las privadas “ahora tuteladas” por El Gobierno. Este figura, la tutela, apareció a raíz de lo acontecido en Celanova.

Feijóo prometió que se comenzarán a hacer tests de diagnóstico en las residencias al ritmo de 800 diarios. “Los mayores siguen siendo prioritarios para nosotros. No vamos a dar una sola vida por perdida, tenga la edad que tenga y presente la patología que presente”, añadió. La oposición no ha dejado pasar el asunto. La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, exigió aclaraciones urgentes del Gobierno en sede parlamentaria y desde Galicia en Común, Antón Gómez-Reinó reclamó que la Xunta “intervenga ya todos los centros de la tercera edad”.

Además las mencionadas San Carlos de Celanova y DomusVI de Cangas y Vigo, también presentan un elevado número de positivos en COVID-19 las residencias de El Portazgo, en A Coruña, con 23 y tres fallecidos; la DomusVI de San Lázaro, en Santiago, con siete fallecidos y 23 contagiados; la de Crecente (Ourense), con 17 infectados; la de Nuestra Señora de la Esperanza, en Ourense, con dos muertos y 15 contagiados; o el Fogar Bellolar, de A Coruña, donde han muerto dos personas y hay seis contagiados.

Las otras residencias que han registrado usuarios fallecidos son la de Castro Caldelas (Ourense), la Divino Maestro de Ourense y la DomusVI de Carballo.

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